I’M DOING IT AGAIN BABY!

No hace falta que pongamos el pie demasiado dentro del segundo elepé de la noruega Marie Ulven para darnos cuenta del impulso que esta ha tenido que coger para conformar su regreso oficial tras el éxito unánime de su debut. Así, y a través de temas que no hacen sino tratar de reafirmar una renovada confianza en sí misma ante el inmediato reto que le ha supuesto revalidar su nombre, girl in red clama a los cuatro vientos que vuelve a la pomada con “I’M DOING IT AGAIN BABY!” (24). Así, en mayúsculas y de la mano de un grandilocuente maximalismo con el que pretende recobrar nuestra validación y reanimar a la desesperada sus a duras penas salvables pistas nuevas.

Con un exuberante triunfalismo y sabiéndose recibida con los brazos abiertos, la cantautora natural de Horten abre el disco sin demasiado espacio para el equívoco o las dobles lecturas: “I’m back, I feel like myself / I was gone for a minute ‘cause I went to get help”, canta en “I’m Back”, conectando de forma directa con los estragos pasados tras haber atravesado en los últimos años depresiones y pérdidas de voz que le empujaron a abandonar temporalmente los escenarios. Un tema situacional con el que narrativamente la noruega nos ofrece verdad y piel, pero que lamentablemente termina arrastrándonos hacia la cara más genérica e insípida del pop de masas (a caballo entre una canción de Disney y el género de explotación Swiftie), definitivamente muy alejado de lo que buscamos en su sonido.

De la mano del tema que parcialmente da nombre al elepé, “DOING IT AGAIN BABY”, Ulven nos desquita del mal trago preliminar y aporta una deliciosa dosis de agitación y desenfado a la fórmula, creando a golpe de indie dosmilero un potente estribillo que se nos quedará en la cabeza al instante (“I’m on a new level, something’s got me feelin’ like I could be inflammable”). Por desgracia, estos momentos de lucidez y diversión en el disco (alguno más nos regala, como el pop-punk sobrio de “Too Much” o la bien jugada colaboración con Sabrina Carpenter en “You Need Me Now?”) no son aditivos suficientes para levantar un todo que logra fútilmente capturar nuestra atención, a pesar de su breve duración.

A todas luces, el nuevo disco de girl in red supone un desacelere claro en la proyección de su carrera y la prueba empírica de los riesgos que siempre supone una segunda mano sin buenas cartas. Por una parte, Ulven supera la tragedia post-adolescente y lánguida de “if i could make it go quiet” (21), pero por otra, no consigue convencernos del todo con las direcciones estilísticas y compositivas que ahora plantea en su nueva hoja de ruta. Un trabajo de transición y un desvío transitorio que tan solo supondrá, estamos seguros, la puerta de entrada para futuras ideas que sí le harán mejor justicia.