¿Quién es Billie Max?

Pocas veces se tiene la oportunidad de sacar un disco con las tablas que da haber estado de gira con un debut, pero con la ilusión y la energía de una primera vez. “¿Quién es Billie Max?” es precisamente esa explosión de vida que solo da la experiencia. Con su segundo álbum de estudio, el cuarteto con base en Madrid se consagra como esas tías que logran hacer de la vida algo fácil, de lo cotidiano, algo extraordinario y de los contratiempos, auténticos himnos festivaleros. Bienvenidos a la montaña rusa que es caminar en los zapatos de Ginebras.

En once cortes logran crear una fiesta que no tiene fin. No hay espacio para la bajona, o por lo menos no para la bajona tal y como la entendemos. Con sus guitarras nos transportan al indie-pop nacional de guitarras que quiso conquistar los festivales de 2012 cuando aún creíamos que todo era posible. Buen rollo intergeneracional y atemporal. Sin grandes riesgos añaden vientos, rollito tropical y dificultad en sus cuerdas, saliendo triunfantes. Pero mientras que su sonido es pura luz, sus letras se comprometen a tratar su realidad en su totalidad, sombras incluidas.

Durante los últimos años su vida ha dado un giro de 360°. Así que abrir este álbum es envararse en un viaje loquísimo de estrella del pop emergentes. Es el descubrir la fiesta, los afters (“Billie Max”) y la locura de un cabeza de cartel y estar agradecida por ello, pero también afrontarse a esos momentos de resaca (“Lunes Negro”), y a la ansiedad que muchos vivimos –sin ir más lejos, dedican “Ansiedad” a una amiga que estaba pasando por un momento muy oscuro con el objetivo de ayudarla. Incluso le dan espacio a los pequeños detalles que hacen de la tranquilidad de nuestra casa, cuando nadie mira ni nos reconoce, algo grande. Igual de bueno puede ser estar “En bolas” en la cocina, como la adrenalina de estar cada día en un festi diferente (“Qué gozadita”). Y si se tiene que esquivar a tíos insufribles (“Alex Turner”), se hace con un buen tema. Este viaje extraordinario, que parece la banda sonora del mejor verano de nuestras vidas, culmina en Muchas gracias por venir, su gran balada grabada en los estudios de Abbey Road.

Lo mejor es que en este viaje no están solas. Es un disco de música, rodeado de buena música. En sus temas mencionan desde Mujeres a Rosalía, pasando por Elvis y no mucho menos importante, logran hacer que el sueño de cualquier fan de El Canto Del Loco se haga realidad: Dani Martín canta junto al cuarteto en “Desastre de persona”.