Giants

Treinta y cinco años después de su debut, el aficionado medio debería tener claro qué esperar en la actualidad de cada nuevo álbum de los legendarios The Stranglers. Para salir ileso del evento resulta imprescindible sortear con más o menos agilidad los tópicos del viejo rockero, junto a la consecución de un trabajo digno y coherente que, sin destacadas cotas compositivas, mantenga a cambio buena parte de la enérgica personalidad del combo. Los británicos se muestran valientes y decididos en la empresa, inaugurando el álbum con una (intrascendente) pieza instrumental seguida de un contúndete tema de más de seis minutos, y lo cierto es que salvan la papeleta con solvencia durante parte del presente álbum cayendo puntualmente en la propia caricatura. Referencias a otros artistas veteranos y dignamente envejecidos como Echo & The Bunnymen, Iggy Pop, The Wedding Present o Edwyn Collins, a lo largo de un disco necesitado en cualquier caso de mayor coherencia y homogeneidad para presumir de ser algo más que una aceptable colección de canciones sueltas.