Con afán didáctico, aunque a veces sucumba a la tentación de impartir ex- cátedra, la rapera de Salt confirma casi todo lo apuntado en su excelente ep «El tentempié», publicado hace un año. El minutaje largo le traiciona, pero no por falta de estupendas ideas y dominio del micro. Simplemente hay ganga que lo es por no rayar a la altura de los mejores momentos del álbum, que aparecen cuando la rabia escupida por la señorita Puello encuentra una base sin exceso melodramático y contención en las muestras orquestales («No hay héroes», por ejemplo).
Entre los cameos destaca el de Frank T, como siempre estólido pero efectivo («Kieres movida»), que además se ha encargado de la producción de la práctica totalidad del disco, conjugando acierto («Todo Por La Pasta») y menor puntería («Arriba los buscavidas»). También colabora IMHOTEP, productor de los franceses IAM, en «Ay caramba», un sindiós de tema que consigue el más difícil todavía: apropiarse del cuerpo de la menuda catalana en un Rosario meets Supernafamacho vía electropop. Rizando el rizo, claro que sí, pero no tan perfecto. No todavía.
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