Llega a nuestro país una de las sensaciones del año en Reino Unido, una de esas nuevas bandas que tanto gusta encumbrar a los medios británicos y que posee todos los elementos que la convierten en mediáticamente perfecta Vocalista agraciada y enigmática, hija de madre británica y padre pakistaní; sonoridades que emparientan la banda con la Björk menos vanguardista y una imagen y actitud lo suficientemente marcianas como para llamar la atención de los reductos más trendy, contando además con el apoyo del mismísimo Thom Yorke.
Detrás de tal parafernalia promocional nos encontramos con una banda liderada por Natasha Khan, una licenciada en artes visuales que traslada la concepción visual del arte a la música, logrando un disco de debut que se hermana con obras como “The Eraser” de Thom Yorke en ese género que recurre a la epidermis electrónica para vestir las canciones con una voz sinuosa y atmosférica, arropándola con cálidas texturas. Así que todo aquel que se haya sentido algo decepcionado con la Björk de “Volta”, o que recuerde con nostalgia la ondulante voz de Kate Bush, será más que bienvenido en el viaje que propone “Fur And Gold”, sobre todo en temas como “Prescilla”, “What’s A Girl to Do?” o quizás el más relevante de todos, “Trophy”, que apunta el potencial de la banda más allá de lo mostrado en su debut.
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