Fire Like This

Las guitarras fieras, el ritmo febril y la escueta dualidad vocal chico-chica siguen marcando el menú del dúo de Brighton en su segundo largo. Unas coordenadas que, especialmente por aquello de la tensión sexual entre sus miembros y lo abrupto de su sonido, les granjeó comparaciones con The White Stripes y, sobre todo, The Kills, aunque una escucha atenta a su propuesta asevere que andan más cerca de Pretty Girls Make Graves o The Duke Spirit. Su segunda remesa de canciones, sin suponer en modo alguno un giro de radar, sí que amplía algo su radio de acción. Porque entre las andanadas marca de la casa, regidas por mastodónticos riffs, bruscos cambios de ritmo, muy medidas dosis de azúcar pop y estribillos incendiarios (como los de “Don’t Ask”, “Keeping It Close”, “Count Me Out” o “One More Empty Chair”) hay también incitaciones al baile con un desparpajo trendie que hasta ahora no habían explotado con tanto descaro (“Heartsink”), sugerentes bajadas de tensión (“Follow The Lines”) y largos desarrollos de psicodelia malsana, como el cierre de “Colours Fade” (deudora de The Jesus & Mary Chain), que está muy en la línea de los que los desaparecidos (e infravalorados) Hoggboy hicieron en su segundo trabajo. Creciendo.