No hay que ser un melómano informado para darse cuenta de que en los últimos años ha habido una proliferación de proyectos artísticos con liderazgo femenino. Ya sea con banda o en solitario, un gran número de mujeres han abierto hueco en el panorama musical con la misma intensidad con la que en muchos momentos fueron invisibilizadas. Eva Martín es un ejemplo de ello pero también de alguien que ha seguido ese camino marcado por las pioneras. Y aunque ese recorrido hasta el despertar interés se presenta a día de hoy algo más accesible para las artistas femeninas, los miedos y obstáculos siguen presentes tanto como antaño.
De todo eso y algunas cosas más habla este “Lo que no supe decirme”. Un EP de poco menos de veinte minutos donde la artista de Portugalete realiza un viaje retrospectivo hasta esa Eva del pasado repleta de temores y complejos que han sido enterrados gracias a las canciones pero también a la terapia que reivindica sin pudor alguno.
Así se muestra en temas como “Dime qué harás” o “Imperfectas decisiones” que hablan de quererse a uno mismo, de aprender y de la confianza adquirida con los errores y frenazos propios; “En mis pies”, que suena tan desnuda como sincera en un alegato de tropezar y seguir intentándolo; o “Cerca del miedo” en la que Eva nos habla de eliminar el dolor interior para emprender un nuevo camino. Algo que resulta mucho más sencillo si se hace rodeada de la gente que queremos como nos canta en “Ni la peor de las tormentas”, que cierra el disco con un mensaje esperanzador acompañado de un consejo claro: las batallas se ganan más fácil cuando se libran en compañía.
Un trabajo íntimo, autocrítico y repleto de sinceridad que revela unos mimbres lo suficientemente consistentes como para estar atentos a cuáles serán sus siguientes pasos y a su evolución como artista.
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