Una figura imprescindible del rap underground español de la de última década sobre la que se ha edificado una leyenda; unas producciones de primer nivel cortesía de algunos de los más reconocidos profesionales del país; un apoyo masivo de compañeros y pilares de la industria musical; colaboraciones de algunos de los representantes del hip hop actual más potentes –de clásicos como Dano a irrupciones como Ergo Pro e Ill Pekeño–. En definitiva, “Shock Wave”, el nuevo álbum de Elio Toffana, ve la luz rodeado de un hálito de clásico incluso desde antes de haber empezado a rodar. Esas expectativas son contraproducentes: todo suena limpísimo, más que cristalino, diamantino; los ingredientes bien seleccionados, independientemente de algún que otro traspiés manifiesto en la parte final del álbum. Aún así, hay algo que se me queda corto. Elio Toffana no consigue romper el cascarón y que su voz trascienda más allá de su corrillo habitual de seguidores, fidelísimos. Hay algo que se me escapa: a medio camino entre la modernidad y el clasicismo, pero no sé por qué, no termina de ser para bien.
Eso sí, “Shock Wave” es un álbum sólido, notable y poderoso, que destaca entre las colaboraciones y las producciones de primerísimo nivel. Elio Toffana, como decíamos, es un maestro lleno de experiencia, y sabe lo que se hace y de quién se rodea: sabe qué quiere decir y sabe cómo decirlo. En “La Gran Belleza” hay una escena memorable en la que Jep Gambardella le viene a decir a una mujer que no es bueno ser experto en algo, que uno corre el riesgo de volverse hábil. Algo así se podría decir, para bien y para mal, de este proyecto.
Elio Toffana domina su universo y le sobra fidelidad entre sus seguidores, lo que implica pocos motivos para dar un volantazo. Pero por suerte para todos suple esa frescura con amigos que se suman a su fiesta, y los amigos responden y la fiesta es espléndida pero el anfitrión parece estar algo triste. Ahora bien, lo mejor del álbum es brillante: “Virgensita”, “Magneto”, “Nadie vivo” y “Altamar”, esta última junto a otra leyenda, el venezolano Lil Supa.
Es difícil crecer en el rap nacional, pero Elio Toffana resiste y resistirá aunque no nos deje con la boca abierta.
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