Harm's Way

Los canadienses Ducks Ltd. ya dieron muestras de su buen hacer, cuando de facturar indie-pop de guitarras del de toda la vida se trata, con su debut de hace tres años “Modern Fiction” (Carpark, 21). Un álbum más que notable que potenció las ganas de una continuación que ahora llega bajo el título de “Harm's Way” (24) y que, en efecto, confirma al grupo liderado por Tom McGreevy como avanzado y de obligado seguimiento dentro de sus coordenadas. Un espacio que transita entre líneas inmediatas de indie-pop tradicional –con clara preferencia por jangle-pop– y, sin embargo y al mismo tiempo, consigue presumir de frescura y pegada vigente.

Es el resultado categórico de aunar espléndidas melodías subyacentes, impecables guitarras ribeteando todas y cada una de las canciones, y la bonita voz de McGreevy guiando el asunto en cuestión. Al igual que sucedía con su antecesor, la presente entrega apenas alcanza la media hora de duración, incluyendo un total de nueve canciones que transitan sin pausa y con ritmo animoso mientras saltan entre bien elegidas influencias que incluyen a The Feelies, Violent Femmes, Felt, The Wedding Present, The Go-Betweens o Beat Happening.

Una serie de referentes que servirían de poco sin el olfato evidente del combo para construir una serie de canciones como la que protagoniza la entrega. El disco se abre con la ilusionante “Hollowed Out” y refrenda inmediatamente estatus con el single “Cathedral City” y ese pepinazo inesquivable que es “The Main Thing”. Un nervio que no decae gracias a piezas del tipo de “On Our Way to the Rave”, una “A Girl, Running” con guitarras a lo David Gedge, “Train Full Of Gasoline” o “Harm’s Way” con ecos a The Housemartins.

Por su parte, ese medio tiempo tan cuco que es “Heavy Bag” confirma sensaciones positivas y, de paso, el buen sabor de boca, ejerciendo como cierre de un elepé que confirma a Ducks Ltd. como una banda encantadora y con un catálogo, hasta la fecha, poco menos que intachable. El grupo evita probaturas y (afortunadamente) sigue la estela de su anterior trabajo, colocándose cerca de Kiwi JR, The Reds, Pinks & Purples, The Goon Sax o incluso The Drums. Bandas, todas ellas, que no cambiarán la vida de nadie, pero que, a cambio, poseen el don de tornarla más colorida y agradable con aparente facilidad y durante media hora.