Pau Vallvé es el ‘self-man made’ por excelencia de la escena catalana: productor, compositor, editor, fotógrafo… y se me acaba el espacio. Como decía, Vallvé, del noble arte de la auto-exploración, recomiendo para este disco la “escucha con auriculares”: sorprende que lo sugiera en su disco más ortodoxo (si esto se puede decir de él), en cuanto a la alineación guitarra-bajo-batería. Podría entenderse que, en esta ocasión, la atención debe prestarse al milímetro para captar con detalle más el ‘què’, sin dejar de empaparse del maravilloso ‘cómo’ (de regusto Radiohead). Ya que en este “de bosc” el cantautor ha combinado la introspección con la feroz (que no gratuita y evidente) crítica social, escuchen sino la maravilla que es “Vaga general”. Pau Vallvé avanza en su propia manera de interpretar la realidad y de paso da una lección a las convenciones: el compromiso, si bello, dos veces compromiso.
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