Si te comparan con Curtis Mayfield es que algo va bien. La consecuencia es que te desmarcas ligeramente desde el principio de otros músicos que también utilizan referencias clásicas. A Curtis Harding le sucede lo mismo que a su héroe, tras este aluvión de músicos que experimentan con el soul, el problema está en que hay muchos clones que llegan a copiarse unos de otros, y hallar ese rasgo más distintivo es algo que no pueden asumir todos.
Con su debut en 2014, después de estar a las órdenes de Cee Lo Green y montar un grupo con Cole Alexander de Black Lips, Harding se desnudaba (literalmente en la portada) mostrando al mundo sus cualidades y sus emociones. Ahora tocaba dar otro paso, abandonar el culto para arrimarse al estrellato. Y la estrategia ha sido contar con Danger Mouse como co-productor y grabar en sus estudios de Nueva York. El resultado es un disco con un sonido lógicamente más moderno, átomos de psicodelia y cierto atrevimiento. Y lo más importante, es un cantante más expresivo, "Go As You Are" es buena prueba.
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