Curtis

“Curtis” no va a cambiar nada. Los fans de 50 Cent seguirán fascinados por su figura de macho dominante y sus credenciales callejeras.

Sus detractores seguirán pensando que el rap no es esto. Y ya está. Porque el tercer álbum propiamente dicho de Curtis Jackson, de ahí el título del álbum, es simplemente eso: un nuevo álbum con la fórmula que siempre le ha ido bien a él, la marca de la casa G-Unit, que suena algo pasada ya, pero que seguro que va a suponer grandes ventas (aunque Kanye West le hiciera morder el polvo). Ni rastro de la confesionalidad que el título o la portada pueden sugerir. Como mucho “All Of Me” junto a Mary J. Blidge, uno de los temas pasables junto a “Peep Show”, con un Eminem estelar. “Ayo Technology” es obvia y a Timbaland ya empezamos a tenerle una tirria tan justificada como incontrolable. Dr. Dre hace lo suyo en “Fire”, un club banger bastante decente. Y del resto lo mejor que se puede decir es que encaja perfectamente en el resto de cosas que ha hecho 50 Cent: algún estribillo resultón por aquí, alguna rima decente por allá y a seguir, porque a este no lo baja del burro ni Kanye ni nadie. Y si no ha ganado lo suficiente con “Curtis”, seguro que las siguientes entregas de “G-Unit Radio” empatan las cuentas. Habrá que esperar a su colaboración con Rich Harrisson en su próximo “Before I Self Destruct”, cuya edición está prevista para 2008, para ver si propone algo nuevo.