Comercial

Después de levantarse a las siete de la mañana sin haber hablado con nadie, Raúl Usieto daba forma a “Canción De Amor nº 21”, uno de los iconos de “Comercial”, el más estable de los trabajos de Pecker. El título ya entraña ironía entre el concepto del indie y del mainstream, algo que le ha dado mucho mal al propio creador. De ahí, con mucho acierto, surge otra canción de dedo acusador: “El dulce porvenir”. ¿Todos culpables o todos inocentes? Hete aquí el quid de la cuestión. Además, la portada es un código QR totalmente operativo. Musicalmente, hay pop brillante y directo sin complejos; con muchas armonías y juegos vocales a lo “shalala” que hacen de este un álbum muy rítmico con matices que se salen del camino, como es el caso de “Rapto en Fa mayor”, una composición de piano a tres manos. Por su lado, “No (todo lo que no)” incita al meneo bajo un trasfondo muy político que, verdaderamente, denota muchísimo las claras intenciones de Pecker después de “Interludio” (EP con Profesor Manso) y del homónimo en 2009 puesto que mantiene la libertad y la música por encima de todo.