The Last Panthers

En plena revolución del cine en formato televisivo, a menudo llegan a nuestros oídos propuestas tan interesantes y llamativas como "The Last Panthers", una serie de seis partes creada por el guionista Jack Thorne ("Skins" o la saga "This is England") y bajo la batuta de Bo Johan Renck, a quien probablemente conocerás por haber dirigido los videoclips de ‘Lazarus’ y ‘Blackstar’ de David Bowie, o por sus otros trabajos para artistas como The Knife, New Order, Lana del Rey o la mismísima Madonna. Con un dúo como este al mando, era de prever que la banda sonora no iba a ser un mero elemento secundario. Y quién mejor para componer el score de este oscuro thriller sobre trotamundos y ladrones de joyas con Samantha Morton o John Hurt a la cabeza –y con tema principal compuesto por Bowie– que el siempre imprevisible Clark, culpable de uno de los mejores trabajos de electrónica de los últimos años, el homónimo "Clark" (Warp Records, 2014).

Si hace poco supimos que Angelo Badalamenti repetía junto a David Lynch como compositor en la nueva temporada de Twin Peaks, esta nueva noticia nos da pistas sobre posibles perspectivas relacionadas con esta recién estrenada faceta del productor inglés, quien ya en el pasado se atrevió a componer un tema (‘Alice’) para el videojuego Sleeping Dogs. ¿Será "The Last Panthers" (Warp Records) el principio de Chris Clark como compositor de música para películas? En sus palabras, “Nunca he trabajado en algo así antes y probablemente haya sido lo más excitante y divertido, pero también aterrador que haya hecho nunca. La narrativa de la serie es amplia, profunda. Abarca muchísimas épocas en las vidas de los personajes, por lo que demanda coherencia. La intención era que el paso de una a otra historia resultara lúcido y natural. Ver la serie editada bajo esta concisa –un bloque de seis partes de un excelente dramatismo– fue muy inspirador y, sin duda alguna, contribuyó a que la música permaneciera fresca”.

El álbum, compuesto de 14 cortes, nos acerca a un Clark a veces ensimismado y otras grandilocuente y solemne. A caballo entre el ambient (‘Cryogenic’, ‘Serbian Daffodil’), la abstracción tecno (‘Back to Belgrade’, ‘Hyde On The Treads 3’) y el drone expansivo (‘Ship is Flooding’), el artista hace gala de todas sus armas compositivas en inquietantes paisajes sonoros y bellas melodías de piano que avanzan al ritmo de impactantes imágenes visuales. Un disco que funciona a la perfección también de forma autónoma y que no tardará en formar parte de los grandes scores de la historia del celuloide. Si no, tiempo al tiempo.