Dos añitos después del juguetón y desinhibido “As If”, los reyes del dance-punk neoyorquino !!! (chk chk chk) -cada vez más dance, en realidad- vuelven a la palestra con nueva colección de doce cortes con los que pretenden mantener su apuesta. Al parecer, las canciones de esta entrega nacieron en improvisaciones en Barcelona, y, a priori, el espíritu sigue siendo el de su predecesor: Hedonismo con clase. Y producción clara y directa, alejada de la adictiva y compleja acidez de su primera etapa.
No hay nada malo en ello. De igual forma que no hay mejor cine (ni más difícil de hacer) que una buena comedia, no se me ocurre ejercicio más noble que hacer música pegadiza o como lo quieran llamar, melodías que nos lleven a mover el esqueleto, que lleguen a mucha gente, pero con neuronas. El problema es que la fórmula que los de Brooklyn destilaron hace ya unos cuantos discos empieza a sufrir de agotamiento. ¿Ley de vida?
Grabado en su estudio, con más peso de los sintetizadores y samplers y el apoyo de hasta cinco cantantes femeninas, los de Nic Offer, que esta vez se reserva menos protagonismo, disparan con el single “The One 2”, con el frontman de los pantalones cortos dándolo todo, falsete incluído y mucho protagonismo coral femenino sobre una bonita maraña funk. El adictivo bajo de “Dancing is the Best Revenge” (¡toma título!) nos devuelve a gozosos territorios de disco mutante, aunque el estribillo se hace obvio y pesa demasiado el recuerdo de glorias pasadas (la sombra de la insuperable “Heart of Hearts” es alargada).
Llegan “NRGQ”, “Five Companies” y “Throttle Service”, con su discreto subidón final, y sigue sin prender la chispa…bajos jugosos, bombos rotundos, guitarras rasgadas, carrerillas melódicas de hip-hop old school, percusiones marcianas, vientos ocasionales, aires house a lo Daft Punk (la divertida “Our Love (U Can Get”). Todo está en su sitio, pero me falta algo. Con excepción de alguna sorpresilla como la popera “Throw Yourself in the River”, la banda se reserva lo mejor justo para el final: La ácida “Things Get Hard” y el medio tiempo “R Rated Pictures”. Lo cual no evita que el déja vu general pese demasiado.
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