Can’t Rush Greatness

Cuando terminas de escuchar “Can’t Rush Greatness” tienes la sensación de que has pasado por algo grande. Cench cuela en este álbum toda la verdad, la lucha, la crudeza que ha ido atravesando mixtape a mixtape hasta hacerse inmortal. Ahora por fin suena sólido, suena a clásico, a pasarse el juego, a subir de nivel y poder permitirse tomar decisiones artísticas sin miedo. “CRG” es un viaje potente hasta la cima del éxito, pero también es honesto y vulnerable. Es una respuesta a un salto en la vida que te empuja para crecer y a la vez te aísla de la realidad. Un golpe para asumir el daño que han hecho ciertas expectativas, dejar de arrastrar todo lo que has perdido por el camino y abrazar el presente.

Y empieza fuerte, con ese repaso al valor de Central Cee en la industria y cómo se ha colocado en lo más alto (recordemos que el álbum abrió en el número uno en Reino Unido por encima de FKA Twigs). “I'm feelin' pain, but I can't complain, my life was harder before the fame. Lost some people along the way and I miss them bad when I contemplate”, lanza mencionando a todas aquellas figurar que no han llegado a ver su coronación. Explicando cómo poco a poco Cench ha sabido conquistar Europa colaboración a colaboración. Trasladar su discurso a la calle, romper fronteras, conseguir que todos se identifiquen con su supervivencia, evolución y éxito alcanzado. Convertirse en una figura aspiracional y rodearse de nombres en los que verdaderamente confía. Un ejemplo de ello es esa comparativa vital que cuela con 21 Savage en “GBP”. “If it weren’t the UK, would've had a AK-47 with a hundred rounds. Red carpet in my trackie and Air Max, they want a boy with a London style. We ain't got generational wealth, got a couple of mill’ for my unborn child”, lanza hablando de lo que se espera de él en UK y la comparativa con el mercado americano. Un tema cuyo propósito central es retratar un cara a cara entre Londres y Atlanta. Las diferencias sobre cómo crecieron en la calle, sus formas de vida pasadas, sus diferentes luchas para alcanzar la victoria… Aunque bueno, si hablamos de comparativa, hermandad, amistad y confianza. Siempre nos va a salir por ahí el nombre de Dave al que a Cench no le cuesta nada citar como uno de los mejores, si no el mejor, MC británico actual.

Y es que Dave llega a “Can’t Rush Greatness” con ganas en el tema que da nombre al álbum y ambos retratan un paralelismo en sus vidas reflejando los valores que les han hecho conectar de una forma tan fuerte. La vida les cambió a lo grande. “And I slept in the trap, smelled like cat piss. Now I'm with a Scarlett Johansson. A-list actress said I'm so handsome, when I wanted a 'fit, I would go Camden”. Pasar de estar encerrado en pisos fumando y oliendo a maría o buscar ropa en Camdem. A ser parte del epicentro del mundo de la fama y que todos quieran tenerte sentado al lado. Una canción con la que además rasga un poco más en todas esas reflexiones sobre las paranoias de cómo ha llegado hasta aquí, qué le ha hecho colarse en este lado del mundo y que expone muy bien Dave cuando suelta eso de: “Asking God, why bless me? I'm a sinner, why bless me when I've sinned?”.

Entre todos los momentos más directos y crudos de Cench en este álbum encontramos, por ejemplo, “Top Freestyle”, en la que tira la credibilidad de la industria por el suelo, su moral, explicando que lo único que a ellos les importa es que lleves dinero al banco. Que en el fondo les da igual lo que hayas hecho con tu vida o si estás metido en grandes movidas mientras no les falles. “Label execs don't care if we're murderers long as your catalogue's bringin' in revenue. They'll sign you and when you go broke and end up in jail, they're quick to forget you”. Y eso que ha firmado un contrato con Columbia de veinticinco millones de libras. En “Limitless” se deja ver también bastante tocado con ese melancólico inicio por parte de Sekou y recordando la pérdida de FDot en 2023, quien luego se convirtiera en su foto de perfil en redes durante bastante tiempo. Y dejando literatura a un lado y mirando la parte más técnica, nos gusta ver cómo, por ejemplo, en “St. Patricks” samplea el “C.R.E.A.M” de Wu-Tang Clan, lo cero prejuicioso que ha sido pillando Young Miko en “Gata” y colándola bien pronto en el disco o cómo ha contado con Mason X Beats (Fredo, ArrDee) para la producción del ya citado temón “Top Freestyle”.

Hay un fuerte autoanálisis por parte de Cench en “Can’t Rush Greatness”. No es un disco solo para lucirse y sacar la mejor cadena de oro macizo a pasear. También es un disco para exhibir una figura humana y vulnerable. Para asumir errores y comportamientos fallidos. Y así lo hace en esa “Now We’re Strangers”, tema junto a Kamal aunque no esté acreditada, donde lo vemos lo más blandito que creo que lo vamos a ver en mucho tiempo explicando que algunas de las acciones que hizo en el pasado se cargaron por así decirlo su relación con la influencer británica Madeline Argy, aunque ella no fuera la tía más fácil con la que te puedes cruzar. Pero claro, no le ayuda la supuesta infidelidad con Ice Spice que salió a la luz en su momento (aunque luego se confirmara que en realidad estaban trabajando en la colaboración que tiene en el álbum de Ice) y que aparece flotando tanto en este tema como en “Gen Z Luv”.

Y bueno, como no podía ser de otra forma, después de tal repaso al universo de Central Cee, “Can’t Rush Greatness” tenía que cerrarse a lo grande y “Don’t Know Anymore” se convierte en uno de los mejores disparos del proyecto comprimiendo en su letra soledad, autocontrol, desilusiones, amistades rotas y despidiéndose de la forma más transparente posible sin tantos escudos. “To get to my current position, I did more than ten thousand hours. I dreamed I saw my name on a tombstone, maybe then they would give me my flowers”. “Can’t Rush Greatness” es puro Reino Unido en vena para exportar, escucharte el disco es colarte una banda sonora de la leche para un buen viaje que te haga conocer UK de verdad más allá del “turisteo”, recorriendo sus calles. Cench no lo ha tenido fácil y siempre ha sabido mirar a su alrededor para aprender de los suyos buscando mil y una formas de avanzar y defenderse. Pero la verdad es que había miedo a que a estas alturas el momento de Central Cee ya hubiera pasado y que, tras dos mixtapes, su álbum de debut llegara tarde. Ha sido un artista con un hype tan alargado en el tiempo que podría haber ocurrido cualquier cosa. Pero al final parece ser que la calidad ha ganado la batalla al consumo agresivo y los trends.