Peregrino
DiscosCarlos Ares

Peregrino

9 / 10
Don Disturbios — 08-02-2024
Empresa — BMG
Género — Indie folk

Es muy posible que el nombre de Carlos Ares no te suene todavía demasiado, pero eso es algo que debería cambiar a partir de este primer largo de debut con el que abre una nueva etapa en su carrera.

Todo un proceso de transmutación que ha derivado en la creación de un personaje, encarnado en la piel de este peregrino que se nos presenta desde el primer tema del álbum. Canción totémica, que abre el disco con un pegajoso riff acústico, que se eleva gracias a la carismática voz aguda de Carlos, capaz de pasar del susurro más dulce al falsete más envolvente y mágico. Todo ello aderezado con un envoltorio musical de tintes indie-folkies que sirve como tarjeta de presentación de lo que ha alcanzado en directo con su actual formación con la que ha logrado una complicidad que desarma al mas escéptico.

A todo esto, todavía no he explicado que Carlos Ares es también un reputado productor que ha trabajado codo con codo con otros músicos de pelaje muy diferente como Paula Cendejas, Maximiliano Calvo o Marc Seguí. Artistas con los que se implica al máximo, co-escribiendo los temas que produce, sacándoles un partido diferente basado en: el especial tratamiento de la voz, un sutil aderezo electrónico y la rítmica de las percusiones. Y es precisamente esa faceta de laboratorio la que se muestra en “Velocidad”, segundo e impetuoso tema del álbum, en el que describe una antigua relación tóxica por posesiva a la que deja en evidencia. Tras esta llega otro de las canciones bandera del álbum. En “Rocios” Carlos demuestra esa capacidad que tiene para combinar su faceta más sensible, con esa habilidad para aunar diferentes tempos de las percusiones con el seco rasgar de las cuerdas de su acústica. ¡Para qué quieres más! si tienes un estribillo ganador que se clava a fuego en tu memoria. Algo parecido sucede con “Cigarra”. “Amigo”, “Odisea” o una “Aquí todavía” que va asumiendo un ligero y envolvente crescendo acústico que explota con una serie de acordes mayores que pueden entroncar su propuesta con las de grupos de indie folk-rock americano como The Decemberists, The New Pornographers o los R.E.M. del "Out Of Time", pero con un barniz pop y de modernidad muy acertado que lo niquela.

“Peregrino” es un álbum muy meditado. No en vano su grabación se ha alargado mucho en el tiempo, al realizarse en base a los empujones económicos que el propio Carlos le iba dando a la grabación, a medida que generaba ingresos suficientes con los beneficios de sus producciones. Un proceso que ha confluido en un conjunto de once canciones en el que no sobra absolutamente nada. Todo tiene un porqué y todo está tamizado desde el más profundo YO del artista. Ese peregrino que se ha ido construyendo a lo largo de un camino, en ocasiones tortuoso y duro, repleto de alegrías pero también de muchos sinsabores. Solo hay que escuchar canciones como la delicada “Terrícola”, “No te pensaré más de la cuenta”, o la dulce "Materia Prestada", para ver esa otra faceta más íntima y frágil de su autor que, durante años, ha sufrido duros ataques de ansiedad convertidos en su peor enemigo. Por todo ello “Peregrino” se presenta como un proceso de terapia absoluto en la que Carlos Ares ha liberado todos sus demonios, para iniciar una nueva época. Una etapa que se me antoja brillante y que puede condensarse a la perfección en el último tema del álbum. ¡Bienvenidos a la nueva era!

Un comentario
  1. Gabriel Lamela Chouciño 6 marzo, 2024

    Muy buen disco. Gracias por la recomendación!

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