Va a tener razón Javier Blánquez al afirmar de los miembros de So Solid Crew que eran “las malas personas más malas personas” de un UK garage ya de por sí bastante malo y violento. Dylan Mills, aka Dizzee Rascal, la next big thing del género, y perteneciente a Roll Deep Crew, algo así como el clan rival, recibió varias puñaladas el pasado 18 de julio: malas lenguas apuestan por la venganza de So Solid (una MC Battle que perdió Asher D contra Rascal). Pero vayamos a lo serio: “Boy In Da Corner” es el esperado debut del chico de apenas dieciocho años, a través de la potente XL y con la prensa y el público de su parte. Y, como el género en conjunto, posee sus atractivos y sus pegas. Dentro de lo último, el aire a chungo, la aridez y simpleza de muchas de sus producciones. ¿Lo bueno? Lo mismo: bajos retumbantes heredados del gabber, rítmica sin prejuicios (hip hop, two-step o big beat en un todo minimalista, grave y contundente) y un Rascal que frasea nervioso y saltarín. Un estupendo disco que, días después de escribir estas líneas, obtuvo el Mercury Prize británico. Lo dicho, bueno, y con el apoyo de todos.
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