Si uno bucea un poco en busca de información sobre este joven talento de las seis cuerdas, se encontrará con un buen puñado de elogios sobre su técnica, garra y genuina pasión a la hora de interpretar el rock y el blues en sus múltiples facetas. Y de verdad que no voy a ser yo quien discuta su valía como ejecutante, que la tiene, pero sí voy a sustentar que su estreno para una multinacional es una metedura de pata que le puede hacer mucho daño en según que círculos, aunque probablemente le abra las puertas del mainstream más acomodado junto a luminarias como Lenny Kravitz o el Prince más despistado. Y digo que es una metedura de pata porque se le nota muy mal asesorado -producen Mike Elizondo (Dr. Dre, Fiona Apple) y Rob Cavallo (Green Day)- a la hora de rescatar canciones ya publicadas anteriormente en su propio sello, y darles un lustre artificial e impostado.
Holy coiscne data batman. Lol!