Shabaka Hutchings es la gran voz de la nueva escena de jazz británica, una escena heterogénea que igual mira en Sun Ra que en Stormzy, una escena en la que hay gente con tanto talento como Nubya García o Moses Boyd y en la que Hutchings participa con varias formaciones como Shabaka And The Ancestors, The Comet Is Coming o los imprescindibles Sons Of Kemet, que ahora vuelven con “Black To The Future”, la continuación del disco referente para esta nueva escena, “Your Queen Is A Reptile”.
Seguir a uno de los pocos discos de jazz de la pasada década que le pueden discutir el título al “Epic” de Kamasi Washington como mayor revulsivo del género no es tarea fácil, pero Hutchings y los suyos han vuelto a cumplir las expectativas con un trabajo espectacular en el que se adentran en la ira y la frustración que significa ser negro en el siglo XXI, mientras las imágenes de brutalidad policial y asesinatos a sangre fría siguen goteando periódicamente en la televisión.
Uno de los temas recurrentes de este disco es “The Source”, o lo que es lo mismo, la fuente, Hutchings y su banda tienen claro que la fuente original de la música popular de los últimos cien años en Occidente está en los ritmos y percusiones africanas, ritmos y percusiones que también llegaron al Caribe a través de los esclavos africanos. Este disco suena como si el jazz hubiera surgido en Barbados en vez de en Nueva Orleans, claro que también va más allá de ese género. Saben cuál es la fuente pero Hutchings y compañía no se quedan en el pasado sino que trazan líneas de conexión con diversos géneros y movimientos en diversos lugares y épocas, así en “Black To The Future” se pueden establecer nexos con el afrobeat nigeriano, el dub jamaicano o el reciente grime. Pasado, presente y futuro parecen comunicarse fluidamente a través de este disco.
El disco se abre con el poeta Joshua Idehen recitando su angustia y su rabia sobre las innumerables injusticias cometidas sobre los hombres negros, "I do not want your equality, it was never yours to give me, and even then it was too minor, too little, too late (No quiero tu igualdad, nunca fue tuya para dármela, e incluso entonces fue demasiado pequeña, demasiado poca, demasiado tarde)" sobre un fondo cercano al free jazz, con Hutchings transformando esos sentimientos en notas de su saxo. “Pick Up Your Burning Cross” incide, desde el título, en esos mismos temas pero le añade una base rítmica mucho más fuerte, llega el momento de bailar tus penas, mueve tu culo y tu mente la seguirá. Logran hacer como si el rap se hubiera inventado sobre una base de jazz, en vez de sobre dos platos y un micrófono.
“Think Of Home” es muy caribeña, la tuba de Theon Cross marca el ritmo junto a la percusión, mientras que Hutchings se luce con una melodía irresistible. Es como llevar el Mardi Grass al Caribe, con un poco de dub al final incluido. “Hustle” fue el primer adelanto, y un acierto pleno, porque aquí sí que consiguen esa ansiada fusión entre jazz y rap, con un Kojey Radical encendido, en el estribillo le ayuda la gloriosa voz de Lianne La Havas. Es una maravilla con la que es imposible quedarse quieto ante su inquietante refrán de "born from the mud with the hustle inside me". Cuando la canción parece que termina, por lo menos la parte vocal, la banda mete otra interpretación que sigue haciendo que tus pies no se quieran quedar quietos.
El disco sigue por los mismos derroteros con “For The Culture”, jazz caribeño mezclado con acentos grime por parte de D Double E, luego llega uno de los temas fundamentales del disco, “To Never Forget The Source”, que fue el segundo adelanto del disco, otra maravilla llena de sutileza, con un Hutchings espectacular al saxo, en una pieza de pura belleza. “In Remembrance Of Those Fallen”, empieza con una percusión festiva, pero cuando entran la tuba y el saxofón la pieza toma un cariz elegíaco, normal en una pieza llamada así, en un disco que gira alrededor del asesinato de George Floyd y del movimiento Black Lives Matters
“Envision Yourself Levitating” comienza como si, efectivamente, tus pies fueran a abandonar el suelo y comenzaran a flotar plácidamente por el aire, pero la canción, como el resto del disco, también está bañada por un poso de dolor y sufrimiento. “Throughout The Madness, Stay Strong” es una canción épica con un Hutchings espectacular. El cierre llega con “Black”, la forma de intentar cerrar un círculo que, por otro lado, quieren dejar abierto. Vuelve Joshua Idehen y la protesta, ahora más irritado, más cabreado, como la música que le rodea, la perfecta encapsulación de su mensaje final "This Black struggle is dance, this Black pain is dance, Just leave Black be, You already have the world, Just leave Black be, Leave us alone (Esta lucha negra es un baile, este dolor negro es un baile, sólo deja a los negros ser, Ya tienes el mundo, Sólo deja a los negros ser, Déjanos en paz)".
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.