Desgraciadamente, ha transcurrido ya más de un decenio desde que los australianos dieran por terminada su carrera y pasaran a engrosar esa fatídica lista de bandas que, tras un brillante periplo, ven como su estirpe se desvanece en la memoria colectiva.
Dicen que el tiempo pone a cada uno en su sitio: la aparición de un doble recopilatorio que incluía caras B, la remasterización y reedición de su discografía completa, la reciente recuperación del llamado «78 ‘til 79-The Lost Album» y un puñado de citas y referencias puntuales por parte de la crème del penúltimo pop contemporáneo, han intentado hacer justicia a un legado impagable.
«Bellavista Terrace» no pretende ser la compilación definitiva ni un greatest hits al uso -el propio Robert Forster ironiza al respecto en las notas interiores del libreto: «nunca tuvimos ningún hit»-, pero sí se presenta como una ocasión inmejorable para adentrarse en el personal universo de tan entrañable formación y redescubrir, de paso, joyas atemporales como «Cattle And Cane» y «Bachelor Kisses»; además de ofrecer la posibilidad de reivindicar a una de las parejas compositivas -Grant McLennan/Robert Forster- más inspiradas de los ochenta.
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