Beside Myself

El debut de los ingleses con Fueled By Ramen recoge el testigo donde lo dejaron con su anterior trabajo. El álbum amplia su sonido de rock alternativo melódico sin renunciar a su sello nostálgico y grunge-noventero, y marca la primera colaboración de Basement con el productor Colin Brittain (All Time Low, 5 Seconds of Summer, Papa Roach), algo que claramente muestra el propósito de ampliar registros, y con ello público que puede potencialmente sumarse a su fanbase, que no ha parado de crecer desde la vuelta de su parón tras la gira de “Colourmeinkindness” en 2012. Siempre simples y efectivos a la vez en sus composiciones, los dos singles adelanto son excelentes muestras de lo que podemos esperar del conjunto: ”Disconnect" y "Be Here Now" muestran su fuerza melódica al tiempo que conservan la sinceridad en las letras gracias al trabajo de Andrew Fisher, que sigue expresándose como un libro abierto, y tiene la capacidad de asumir la tristeza y de reflexionar sobre sus problemas y preocupaciones normalizando que se puede estar jodido, y que no pasa nada por ello.

Fisher reflexiona sobre su inconformismo con el presente en “Here Now (“I lost myself in the mo-ment / Why can't I just be here now?”), expone sus sentimientos hace una relación y su profundo anhelo por esa persona en “Keepsake” (“Can you put me in your pocket? / Let me be your lucky charm / I’m right here waiting / So come and use me”) y relata en “Ultraviolet” la vulnerabilidad que sintió tras enterarse del atentado del puente de Westmister de Londres en 2017. El punto acústico del álbum lo aporta “Changing Lanes”, que actua como una suerte de interludio que separa la es-cucha del álbum en dos.

A nivel instrumental, muchas melodías resultan pegadizas, pero mantienen la oscuridad de fondo que les caracteriza. Quizás no funcionan con tanta inmediatez como en anteriores trabajos, pero consiguen que el disco crezca a medida que avanzan las escuchas gracias a sus múltiples capas que acompañan perfectamente al genuino discurso de amor y tristeza, todo expuesto de manera genuina y sin trampa ni cartón encima de la mesa.