Los últimos años del cuarteto parisino merecen un estudio sociológico. Tras tres primeros trabajos excepcionales, que les generaron poco más que un seguimiento de culto, llegó en 2009 “Wolfgang Amadeus Phoenix”, un álbum que llevaba un paso más allá su querencia por el encaje de ritmos complejos y sintetizadores con guiños ochenteros. Sin destacar de una manera especial del resto de su discografía, como si hubieran tocado en el momento adecuado la tecla precisa y conocido a la gente precisa, el disco funcionó como un trampolín que les llevó a ser una de las bandas más respetadas del circuito.
Cuatro años más tarde, todavía sigue el halo vigente, llevándoles a encabezar festivales en todo el mundo, incluidos referentes como Coachella o nuestro Primavera Sound. Lo que ocurre es que “Bankrupt” es el disco de la resaca. Más de lo mismo respecto a su anterior referencia, algo no necesariamente negativo, sobre todo cuando contamos con temas como “Entertainment”, “Trying To Be Cool” o la misma “Bankrupt!”, pero que sí deja la sensación de que quizás se haya exagerado un tanto la adoración que rodea desde hace unos años al combo francés.
¿más nota a estos impresentables que a The Strokes? En fin,para gustos colores.
Nadie lee mondosonoro XD
Un discazo