2021: An Earth Oddity

De diva clásica del blues a cantar con bases electrónicas y traperas, pasando por el pop y hasta el reggae. No son las múltiples caras de Jara Aiala, sino tan solo una: la de una artista ecléctica que escucha de todo y, por tanto, se nutre de múltiples estilos. “2021: An Earth Oddity” es la confirmación de Aiala como uno de los próximos referentes estatales de la música que, partiendo de lo afroamericano, explora distintos géneros. Además, su voz es ideal para ser comparada con las grandes del género como Aretha Franklin o Amy Winehouse, algo que ya quedó claro con “Nothin Less Than Art” (19), su debut. En este segundo álbum, la cantante catalana reafirma sus raíces vocales, pero madura muchísimo a nivel sonoro.

Hasta en silencio, Aiala no puede parar de pensar en la música. Eso hace que sus temas sean aptos para cualquier momento del día, en cualquier situación. De ello habla al principio del álbum en “Face To Face (Silence)”, en colaboración con una banda formada por Macià Amorós (batería), Pol Sistach (guitarra), Celia del Barco (voces), Chalart58 (percusión) y Joan Vigo (contrabajo). Chalart58 es, también, el productor del disco, que perfila mágicamente cada detalle hasta conseguir, junto a la cantante, esta evolución sonora que sobresale en cada canción. Lo diferente, el amor, resistir o aprender son las diferentes temáticas a las que la cantante se refiere a lo largo del disco, siempre a través de múltiples referencias estéticas no solo musicales sino también cinematográficas, como el increíble inicio tarantiniano de “Fighting And Learning”.

El nombre del disco, por muy cuarenténico que parezca, alude al sentimiento de sentirse rara en la propia Tierra, algo que tanto dos grandes como Bowie y Kubrick supieron ver y comunicar con su arte. Para Aiala, la música es eso: comunicación a través de las emociones aun pensando que una no encaja en este mundo. De ello habla en canciones como “White Wine (Raro)”, en colaboración con el trapero catalán Spxxn P, una unión entre el blues y el trap magnífica en menos de cuatro minutos, en inglés y catalán. Sin embargo, no deja sus raíces atrás, y añade una excelente versión de “Maldito Dinero” de las Draps Bruts realmente enérgica, un mood que continua con “Love And Power”, otro tema electrónico que acompaña al cierre del disco hasta lo más alto. Aiala no puede parar de crear y trabajar, algo que le ha hecho avanzar y evolucionar a paso de gigante en este segundo álbum.