El secreto para comprender la transformación del rocoso Jason Ringenberg (Jason & The Scorchers) en el simpaticote Granjero Jason está en la paternidad. Helsey Beth, Camille Grace y Addie Rose -las tres hijas de Ringenberg, para más señas- son, en realidad, las responsables de que un álbum como éste vea la luz.
En él, Jason Ringenberg no sólo se convierte en un alborotado granjero, sino también en el guía infantil ideal del mundo rural. Presenta ufano a los animales de la granja para acabar cantando sobre ellos en clave country, de una manera tan didáctica como jovial. A los niños les encanta y, aunque lo suyo es entender las letras (muy básicas, aunque lógicamente en inglés), las contagiosas melodías y las continuas onomatopeyas del granjero resultan el gancho perfecto para los no angloparlantes. En lo musical, “A Day At The Farm With Farmer Jason” muestra el dominio que Ringenberg posee del lenguaje country, que le permite una exitosa y nada forzada adaptación de registros. Pero lo más importante es que éste es un disco perfecto para su pequeño público. No pretende nada más. Media hora de felicidad infantil y una sonrisa. Y eso no tiene precio.
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.