A Certain Trigger

Parece ser que, mientras nosotros andábamos distraídos con las formaciones que emergían de New York, las calles británicas andaban bastante revueltas. Los tiempos del brit pop quedan ya muy atrás y sabemos que en las islas la música se vive, se transpira y genera avalanchas de formaciones semana sí y semana también. Por eso no paran de surgir nuevas bandas. Algunas no merecen demasiada atención (Razorlight, Eastern Lane, Nine Black Alps), otros deben aprovechar su momento y nosotros con ellos. Podríamos hablar de The Futureheads, The Departure, de los injustamente ninguneados Dogs Die In Hot Cars y de, claro está, Maxïmo Park, el fichaje más rock de toda la historia de Warp junto a Chk Chk Chk. La mayor parte recuperan un momento u otro del pasado musical británico.

Nuestros protagonistas acuden a finales de los setenta, a la new wave, al pop rock independiente de aquellos días y lo bordan en su ejercicio revivalista, aunque fresco y vital. Sus canciones parecen pedir permiso para sonar en nuestros equipos y, una vez allí, se crecen como el mejor aceite de oliva para acabar convirtiéndose en lo que son, en excelentes y modestas canciones de pop rock con acento marcadamente inglés. "Apply Some Pressure", "Limassol", "Graffiti", "The Coast Is Always Changing", "The Night I Lost My Head", hits singles (hasta cuatro de ellas ya también en el sentido físico de la palabra) que lo son con las escuchas y que recuperan el legado -se lo repito de nuevo- de Buzzcocks, XTC, Joy Division, Undertones… Y basta ya. Si me creen, vale y si no también.