Discreta asistencia de público para la visita de uno de los grupos de rock australianos más legendarios de la historia y otra muestra de la poca memoria histórica que atesora la audiencia barcelonesa –y van...-. Los Scientists con Kim Salmon en forma –sus guitarrazos y aullidos aún dan el pego y convencen- a la cabeza y como único miembro original –acompañado tan solo por una batería y un bajista-, se presentaron en el Razz 3 para demostrar la vigencia de su oscura concepción del rock.
Nacidos casi al mismo tiempo que The Cramps pero en la otra parte del globo, los científicos supieron pasar de un punk-rock de querencia velvetiana y a la New York Dolls, a una personal relectura tenebrosa y oscura del rock -algunos lo llamaron swamp-rock-, más cruda que la de Lux Interior and Cia, que les valió cierta repercusión en Europa. Esa noche, en Barcelona, un Salmon animado optó por la segunda etapa de su banda y ofreció acertadas interpretaciones de clásicos como “We Had Love”, “Swamp Land”, “Human Jukebox”, “Frantic Romatic” o “Happy Hour”, todos ellos temas que ya pertenecen a la historia reciente de la música popular. En definitiva, digno retorno de unos clásicos.
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