Buena acogida de público en la séptima edición del Eastpak Antidote Tour a su nuevo paso por la ciudad condal. Los jóvenes pamploneses Marvin fueron los escogidos, mediante un concurso promovido a través de las redes sociales, para abrir la noche, demostrando con oficio su merecida elección. Prosiguieron con el mismo estilo, punk pop con tintes de hardcore melódico, los canadienses Living With Lions, provocando los primeros circle pits en el centro de la pista. El cambio de registro vino con The Ghost Inside, con un metalcore potente que hizo temblar la sala desde el primer al último tema. August Burns Red se ganaron a gran parte del público nada más salir al escenario al aparecer su baterista, Matt Greiner, ataviado con una camiseta de Messi, una anécdota que quedaría en segundo plano tras los excelsos 40 minutos de actuación. La noche se completó con A Day To Remember que, a pesar de preparar un setlist casi idéntico al de su primera visita hace tan sólo nueve meses, mejoraron considerablemente su puesta en escena, favorecida en parte por la diferencia de tamaño del escenario y también por algunos detalles destacables como el stage-dive de Jeremy McKinnon, que se paseó durante “Homesick” rodando por encima de todo el público en el interior de una burbuja gigante al estilo The Flaming Lips; o la inmensa lluvia de globos y pelotas hinchables que cayeron con "The Plot To Bomb The Panhandle" y “The Downfall of Us All” convirtiendo la sala en una auténtica fiesta.
increíble.