Mucha energía y un inesperado final
ConciertosShame

Mucha energía y un inesperado final

7 / 10
Daniel Treviño — 28-05-2018
Empresa — Live Nation España S.A.U.
Fecha — 15 mayo, 2018
Sala — La Boite
Fotografía — Nacho Ballesteros

Salir airoso de un bolo un martes por la noche no es ninguna hazaña fácil y Shame salvaron la velada por los pelos. Sin un lleno en la sala, nada que ver con el sold out del día anterior en Barcelona, pero con un aforo consistente de público. Los del Sur de Londres venían a presentar Songs of Praise, su primer disco, editado a principios de año por Dead Oceans. Si bien el fallo del LP fue no poder condensar la energía del directo en el estudio, la impecable ejecución de Shame en la Boite dio a entender que estos últimos dos años de gira constante han calado en la banda y que teníamos en frente a unos músicos con tablas de sobra.

Sonaron todos los temas del disco, más alguno nuevo y la energía del concierto supuraba ya desde el arranque (Dust on Trial), donde Charlie no esperó ni a la segunda canción para hacer el primer crowdsurfing de la noche. Concrete, One Rizla o Friction tuvieron una acogida fortísima en el público, que coreaba los temas como si Shame jugaran en casa y movió a las primeras filas en un pogo que duró del principio al final. Tasteless marcó uno de los puntos álgidos de la noche, con público y banda comulgando en una mezcla de distorsión, rabia y sudor: los momentos cumbre de los temas ponían a Josh por los aires. Y quizás ese sea el problema de Shame: un bolo que se mantiene siempre arriba termina por hacer monótona la extravagancia.

El delirante final tuvo, de hecho, un percance con el bajo de Josh; quien tuvo que terminar la última canción con un bajo para zurdos cortesía de la banda telonera. Verle hacer malabares con un bajo del revés puso el colofón a una noche que dejó un extraño sabor de boca. ¿Estamos ante una banda que será capaz de sostener el hype? ¿Serán capaces Shame de engendrar una segunda parte que dé continuidad a lo que han conseguido estos dos años? Las respuestas, de momento, la que usa Charlie antes de que la banda desaparezca del escenario tras la última canción: Shame, Shame, Shame. That’s the name.

Lo siento, debes estar para publicar un comentario.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.