Lo de Porcupine Tree ha sido una carrera de fondo, larga pero ascendente en cuanto a repercusión y, sobre todo, en cuanto a ganar disco a disco nuevos adeptos para su causa. Una misión que no es otra que la del rock progresivo en el sentido más clásico del término. Para los neófitos y simplicando bastante podríamos decir que la banda del inquieto Steven Wilson (voz, guitarra y teclado) es el punto de encuentro entre los Pink Floyd más atmosféricos y los Tool menos esquizoides. Vaya que son una banda que maneja a la perfección el tempo, la creación de atmósferas ahora bellas, ahora algo asfixiantes que te van preparando para la descarga atronadora basada en el riff de intensidad roquera. Son por tanto una banda de patrones clásicos, muy clásicos. Y es precisamente ese regusto algo añejo y setentero lo que más gusta a unos seguidores que rozan la mediana edad y que vivieron su adolescencia rodeados de discos de Rush, Marillion, Genesis y King Crimson. Porcupine Tree es posiblemente la banda que mejor recoge y condensa ese legado sin caer en las duras aguas del metal, tal y cómo demostraron anoche en un Sant Jordi Club que presentaba algo más de media entrada. Un concierto dividido en dos partes con descanso incluido. Una primera basada en su totalidad en el álbum que venían a presentar “The Incident” (2009) y una segunda en la que echaron mano de temas de diversos discos y etapas como: “The Star Of Something Beautiful”, “Russia On Ice”, “Anesthetize” o una “Trains” reservada para el último bis en el que Steven Wilson agradeció al respetable por ser el público más entusiasta de sus giras. Y aunque desconozco si eso se lo dirá a todos, lo cierto es que la gente salió encantada con la demostración de perfecta ejecución instrumental, aunque particularmente la encontre por momentos demasiado seria y anodina. Muy concentrada en la música y ajena a parafernalias que siempre ayudan visualmente y te hacen un bolo más llevadero.Y es que ya puestos a exigir, no hubiera costado nada tener una pantalla de vídeo más acorde con las dimensiones del escenario, pero bueno...
Que telonearan Tony Levin y Pat Mastelotto (king Crimson) me parece al ostia... una pena que los dejaran a medio gas para no quitar protagonismo
Ei company!... no he hecho ningún comentario al respecto porque no llegué a tiempo... eso de hacer los conciertos tan pronto va en contra de la conciliación familiar!!... .je je... ¿Los dejaron a medio gas?... cuenta, cueta....
Buenas!
Coño, y yo que pensaba que un concierto era de música 😉 Hombre, en que deberían haber estado concentrados? en leer el periódico? jejeje, sorry es que me lo has puesto a huevo 😉
En todo caso, tan concentrados en la música como los Crimson, Floyd, Yes, Rush, etc, etc, no?
Salutacions!!
Por supuesto que hay que concentrarse en la música, pero no está de más revestir a tu show de cierta propuesta escénica... y ojo!, no estoy hablando de cerdos volantes, pero al menos dale más fuerza y valor a tus proyecciones. Pon una pantalla más grande... y si no, no pongas nada,,,,
Sí, sé que ibas por ahí, pero tal como está escrito parece que sea un problema estar concentrados en la música, sólo eso. Y en lo de la pantalla, tienes razón en que quedaba ridícula en tan gran escenario, pero ya me imagino que deben llevar una que quepa en todas las salas. Pero...
Sabía que al final acabaríamos entendiendo.... je je je... además alguna pega había que ponerle a un concierto inmaculado.... claro que a veces, incluso eso, puede ser un problema... En la imperfección también reside la belleza
Hombre, claro que nos entendemos, ya se sabe que esto también va a gustos. Pero yo con un concierto musicalmente inmaculado, tengo suficiente 😉 No me refiero sólo al aspecto técnico, sino también al emocional y excitante. Claro que a mi me gustó más, que soy más fan del grupo, jeje. A reveure!!
Supongo que al no poder emitir imágenes en el Apolo no se la jugaron.Que buenas imágenes.A ver si vuelven y el 2010 tenemos conciertazos como Porcupine Tree,Blackfield,Harvest,Marillion,Dream Theater,Coldplay,Muse,Radiohead y por pedir, Rush, que ya toca.
The tendency in our curtule to turn everything into a competition is so worrying. If the adults didn't compete so much, maybe it wouldn't be such a big deal if some children were different.