Pequeña gran noche
Conciertos

Pequeña gran noche

-- / 10
03-10-2014
Empresa — Ginmúsica
Sala — Gazteszena
Fotografía — Juan González

Considerado como una de las primeras citas de la agenda de otoño, Donostikluba arrancaba su primera jornada con el concierto previo de Ghost Number & His Tipsy Gypsies en Le Bukowski.
El grupo local donostiarra marcado por una imagen muy sureña y sonidos de sabor añejo intento dejar constancia de su peculiar y muy trabajado folk. Un sonido algo complicado y unos parroquianos algo charlatanes hicieron del concierto una pequeña degustación para seguirles la pista de sus próximas citas.

Un denominador común de estilos destacaba la noche en Gazteszena con Free Fall Band, Trajano!, los noruegos Beezewax e Is Tropical.
Impolutos de blanco comenzaron Free Fall Band puntuales con un sonido trabajado y cada vez más maduro. ‘The Münster Sights’ último trabajo de los catalanes hacen que se desenvuelvan con gran soltura sobre el escenario y no solo musicalmente. Cerraron su turno con la archiconocida “When the Apple Tree”, sintonía del famoso reality de la familia Primavera Sound que hizo rumorear a la sala durante unos minutos.

Llegaba Trajano! para presentar ‘Antropología’ y se notaba que tenían a unos cuantos acérrimos seguidores. Su estilo catalogado como post-punk (aunque ellos aseguran desconocer el significado) se centra en luminosos riffs que consiguen arrancar los primeros movimientos de cadera de los presentes con “Las Nieves del Kilimanjaro” o “El Ultimo Hombre del Mundo”.
Los tintes oscuros que plasmaron fueron realmente contundentes cuando refrescaron su anterior EP ‘Terror Planetario’. Sus referencias están claras y las comparaciones son odiosas por eso “Interludio” y “Jaguar” sonaron buscando esa comunión de disfrute con el publico, que al final es su seña de identidad.

Con enorme actitud aparecían en escena Beezewax (en la foto) sobre la medianoche. Era su primera visita a la capital guipuzcoana y tenían claro sus intenciones de dejar huella, por eso su vocalista Kenneth Ishak (con una preciosa mutación artesanal entre SG y Gretsch en sus manos) lideró al grupo que sonó francamente bien. Referencias claras como son del indie-rock y power pop europeo, su tracklist fue un pequeño repaso de ‘Who To Salute’ alternando sus nuevos temas, encabezados por los singles “Everyone Will Tear You Down” y “Hazzard” que vio la luz recientemente. Con planes surfistas en mente que comentaban durante su actuación y siendo el primer grupo de la noche que superaba ligeramente la hora de repertorio dejaron paso al trío ingles.
Is Tropical, llegaba con la ultima inyección de publico que tenia claro el horario de los británicos y terminaba por rellenar la sala.

Con formación de trío y electrónica por bandera consiguieron que los temas no pierdan sino ganen en intensidad con respecto a lo ofrecido en los trabajos de estudio. Siguiendo una linea muy medida de intensidades repasaron desde “Land Of The Nod”, “The Greeks” y “Lies” de su álbum debut ‘Native to’ para acabar cerrando con su material mas reciente ‘I’m Leaving’ y poner el colofón final al son de “Sun Sun” y la coreada “Dancing Anymore”.

Lo siento, debes estar para publicar un comentario.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Pequeña gran noche
ConciertosThe Dillinger Escape Plan

Pequeña gran noche

9 / 10
Eduard Tuset — 25-06-2014
Empresa — Madness Live
Sala — Apolo, Barcelona
Fotografía — Hara Amorós

Asistir a un concierto de The Dillinger Escape Plan es casi una experiencia mística. Luces de estrobo cegadoras constantes, proyecciones con referencias a películas clásicas como “Metropolis” o a figuras geométricas imposibles. Lo difícil también se hace realidad en los movimientos de Greg Pucciato y los saltos a oscuras de su guitarra Ben Weinman. Toda esa intensidad visual acompañada de inicio por temas tan coreados como “Farewell Mona Lisa” o “Milk Lizard” que hace que las dos primeras filas se conviertan en un moshpit continuo, con saltos, golpes y micros que acaban en el suelo.

Los de New Jersey ofrecieron una hora justa que se sitúa entre los mejores conciertos extremos de la temporada sin dificultad. Una atronadora descarga musical y visual que solamente se tranquiliza en momentos concretos con canciones como “One Of Us Is The Killer” de su último disco, en el que la influencia de bandas como Nine Inch Nails o Faith No More resulta totalmente visible. Eso sí, los bises fueron arrolladores. Primero con su ya conocida versión del “Come To Daddy” de Aphex Twin y a continuación con “Sunshine The Werewolf”, tema que sirvió para hacer que la mitad de la sala Apolo se subiese al escenario, invadiéndolo completamente y subiendo a hombros, uno a uno, a todos los miembros de la banda. Un final épico para una gran noche.

Lo siento, debes estar para publicar un comentario.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.