El manejo del ritmo
ConciertosLa Kinky Beat

El manejo del ritmo

8 / 10
Don Disturbios — 17-12-2008
Empresa — Kasba Music
Fotografía — Archivo

Poco queda que añadir tras un concierto de La Kinky Beat. Sus incondicionales saben de su pericia sobre el escenario, sobre todo a la hora de manejar de forma absolutamente frenética el ritmo. Y todos aquellos que no los conocen o simplemente no disfrutan de su rock correoso, su dub incediario y su ragga acelerado, les deben haber llegado noticias, por diferentes medios, que ante su directo poco o nada puedes hacer. O te rindes o te echan con una patada directa a tu culo de patán que no desea moverse. Porque más allá de las canciones, más allá de Matahari, su vocalista, y más allá de la dinámica de un concierto que va de menos a más como un corredor de fondo, lo que hay es una base rítmica de infarto. Y lo demuestran a la que se les dejas solos. Cuando se fundieron en un largo set instrumental en el que pusieron todo el ritmo en el asador, aquello ya no había quién lo parada, era simplemente arrollador. Algo capaz de incendiar una carpa de tecno-heads a las cuatro de las madrugada en cualquier festival del mundo tras una sesión de drum’n bass, de jungle o lo que fuera. Porque es muy posible que La Kinky Beat no sean la banda más original del mundo; es muy posible también que en ocasiones patinen hacia una obviedad punk de la que se van desprendiendo a cada nuevo paso, pero lo que nadie les puede negar es que lo suyo es tan auténtico y veraz como un puñetazo en los morros. Y así, sin cortar, puros como ese orgullo de barrio que en cierta medida revindican, se presentan sobre un escenario. Y eso es más de lo que muchas bandas con coartadas más cool pueden nunca si quiera aspirar. Por eso cuando la gira de su disco más accesible y variado llega a su fin, cuando su acercamiento al hip hop empieza a evidenciarse más y cuando dejaron caer temas como “Itaka Berrirof” de Fermín Muguruza (gran homenaje), como “Karate Beat” que en cierta medida los ha redefinido o vestigios del pasado como “Sube sube que nos vamos pa las nubes... Por todo eso, vale mucho la pena no perdérselos. A ver si el próximo Apolo lo revientan, haya o no haya crisis.

Lo siento, debes estar para publicar un comentario.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.