Tener a Julieta enfrente te hace sentir tan protagonista de su espectáculo como lo es ella misma. Pocas artistas locales consiguen transmitirte tanto por todos los sentidos, con esas brillantes luces y un look cuidadosamente diseñado para realzar una actuación ya de por sí brillante en lo estrictamente musical.
El último bolo del “Alguna Nit Tour” fue un espectáculo pop de sentimientos, acompañado de una coreografía y presencia escénica que no tiene nada que envidiar a las divas que dominan los escenarios.
La ilusión y las ganas del público de ver a Julieta ya se palpaban horas previas al inicio del concierto con una larga cola desde primera hora de la tarde. Pasadas las 20:30 empezó la actuación de Ariox, artista invitada y amiga de la protagonista de la noche. Durante la media hora de actuación, que una parte de los asistentes aprovechó para acabar de ir entrando, la de Cardedeu fue caldeando el ambiente y recibió una cálida bienvenida por parte de las más de 1.000 personas que esperaban ansiosas por ver a su “Catalan dream”.
Mi expectación había ido creciendo a medida que veía videos de los otros conciertos de la gira, y la verdad que esta joven promesa -si es que no se la puede coronar ya como reina catalana del pop- se robó el show y no dejó ni una miga.
“Digue’m el que sents o si sents algo per mi”. Con esta contundente frase empezaba puntual el concierto de Julieta en la Sala Apolo de Barcelona con el cartel de sold out colgado. Vestida de blanco, adornada con brillantes y con su rubio pelo acariciado por un viento muy bien calculado, Julieta desprendía una energía angelical que acompañó durante casi hora y media a su dulce voz.
“Enamorada de tu” fue la segunda canción del concierto y cerró el primero de los nueve bloques con los que reorientaba los distintos momentos del show. Este reggaeton de la mano de Lowlight hizo entrar al público en un frenesí de euforia y cánticos que nos acompañaron toda la noche. “Apolo és casa meva, moltes de les històries de les cançons han passat aquí”, comentaba Julieta, emocionada de poder actuar en una sala tan emblemática como lo es esta. “Si ha de ser serà”, “Secr3t” y “Si tienes frío” siguieron esta historia de amor que apenas acababa de empezar. Así como en “Si tienes frío” se puso un abrigo de pelo, para la siguiente canción no le hizo falta nada más que su presencia y la coreografía de sus bailarinas para complementar la icónica canción de Patito Feo “Las divinas”.
Con esta energía alegre y nostálgica que se estaba viviendo, empezó a cantar “Algun dia” y se mantuvo esta vibra dance cuando seguidamente apareció la mallorquina Maria Hein para cantar “Club”. Fue la primera canción en que los saltos de la gente hicieron retumbar el suelo; pero no sería la última. Después de “Ens besem”, “En la plaza”, “En mi mente” y “Tu juru ju” estábamos todos disfrutando tanto que no pensábamos que pudiese ir a mejor. Hasta que de repente, después de hacernos creer que una persona muy especial no había podido venir, apareció Mushka para cantar su último tema juntas, “No m’estima +”. Las jóvenes protagonistas de una escena musical catalana renovada brindaron el acontecimiento del año y en segundos nos tenían a todos, sin excepción, gozando como nunca.
La artista calmó la exaltación con dos de sus baladas antes de entrar en un mundo onírico con “Avions volant”, que nos permitió un momento para recuperarnos antes de que apareciesen The Tyets preparados para cantar “Clar que t’he trobat a faltar”. Al final de la canción no hizo falta ni la música para que la sala entera se entregase en cuerpo y alma y es que consiguieron que nos identificáramos con el “Ei, t’allunyes i t’emportes amb tu el meu amor i ja no tinc escut”.
La recta final la inauguró el nuevo estreno de la artista que ha conseguido llevar el catalán a las Gallery Sessions. Después de un “T’enxules” acompañado de un fan project en que todos los asistentes levantaron unos carteles donde se leía “Ju, ets la nostra preferida”, la siguieron los hits más dance y discotequeros que pusieron a temblar toda la sala. El setlist fue inmejorable y lo cerró con “Com aquell agost” y “Trenca’m el cor”, que nos dejan frases con las que sentirse identificado al final de concierto como: “Però amor, saps que jo a tu t’enyoro / Perquè quan es fa fosc sempre ens ploro” o “Et tinc dins del meu cap i no pots sortir”.
Y todo eso se quedará en nuestra mente recordando como Julieta nos cuenta con su música una historia de amor en todas sus fases. Y puede ser que a ella le hayan roto el corazón, pero de lo que no queda duda es que a nosotros nos lo robó desde el primer momento de actuación con sus pegadizas melodías y su más que sobresaliente show.
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