No me hubiera esperado nunca el pasotismo del público de Barcelona frente a una banda como Cubanate (con el guitarrista de Entwined como invitado). Uno puede entender que la mayor parte de los asistentes les considerasen una banda nueva, pero aún así no se entiende que el poco interés que despertó su metal trancero. Lo curioso fue que, en lugar de centrarse en su último disco (editado hace dos años), acertaron a repasar toda su carrera. Abrieron con los potentes temas de «Cyberia», para adentrarse más tarde en «Barbarrossa» y acabar en el drum’n’bass metálico de sus últimas canciones. Lo mejor, su batería (reducido a percusionista, puesto que todas las bases estaban programadas) y ese vocalista digno de Village People. Por su parte, Will Haven presentaban «WHVN» y lo único que consiguieron fue aburrir con su hardcore oscuro. Con un vocalista mimético, empeñado en emular a Henry Rollins (y no solamente por ir descalzo y poner cara de palo), para acabar cantando descaradamente a lo Earth Crisis. Sobrevalorados. A Fear Factory ya les hemos visto muchas veces. Eso significa que no había sorpresas posibles. Todos sabíamos que, de nuevo, íbamos a encontrarnos con un concierto perfecto en cuanto a sonido, puesta en escena y técnica. Los temas serían los de siempre: «Self Immolation», «Replica», «Scapegoat», «New Breed» y, por supuesto, los temas de «Obsolete» como «Shock», «Ressurection», «Edgecrusher», «Smasher/Devourer», «Securitron» o la fallida «Descent». Obviamente, tampoco faltarían los guiños y las bromas versioneando a Slayer, Pantera, Metallica, etc, ni mucho menos los habituales «¡Viva México cabrón!«de Dino Cazares. Unos maestros.
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