Cannabis y Reggae

La feria del cannabis ExpoGrow volvió a Irun después de 3 años sin celebrarse. La ciudad fronteriza guipuzcoana albergó de nuevo, después de mucho tiempo sin eventos culturales y vuelta la “normalidad”, una de las ferias mas importantes del cannabis en la península. El día 09 de septiembre abrió al público los 3 pabellones de Ficoba, llenos de stands dedicados a toda la industria cannábica, desde bancos de semillas hasta prensa especializada pasando por asesoría de leyes y abogados, conferencias y ponencias, la linea del frente de la lucha por nuestra planta querida.

El sábado 10 fue la jornada elegida para el Festival de Música, 3 conciertos estaban anunciados: French Touch Squad, Anthony B y Iseo & Dodosound. A escasas 24 horas me comunicaron que por problemas de visado Anthony B no podía asistir y en su lugar actuaría Turbulence. La zona exterior donde se celebraba el festival estuvo animada desde las 11h de la mañana hasta el comienzo de los conciertos por el Sound System de Equal Brothers desde Iparralde, en el Monkey Corner, con su selección de reggae, dub, ambientando la zona de food trucks y de castillos hinchables.

A eso de las 19:40 dentro de la carpa circular y acogedora donde está el escenario, French Touch Squad aparecen en escena. Se presentan como un colectivo de diferentes estilos y procedencias, que abarca desde el reggae, dancehall, hasta el hip hop parisino. Con el Dj Keshkoon a los mandos de la mezcladora fueron pasando por diferentes paisajes urbanos, comenzando con el reggae lover de “Tuco Gadamm” para rápidamente pasar al hip hop de “París” con su cruda y dura forma de expresión. Siguieron con el hip hop y sus rimas “V.O.D” y “2 Cheese Milkshake”. Volvieron al reggae con “Tiwony”, que volvió a crear un ambiente menos tenso y mas cómodo, así como con “Dapatch MC” y “Davojah”, que llevaron más a Jamaica al público y eso hizo que se empezara a llenar el recinto y la gente bailara y sonriera. Dieron de nuevo un cambio de rumbo hacia el rap francés con “Busta Flex” y “Sir Samuel”, soltando rimas afiladas y que contagiaban sentimiento de rabia y desahogo, podías sentir la atmósfera de un barrio conflictivo parisino. Después de más de dos horas dieron por finalizado el concierto todos los cantantes juntos en un último tema compartido.

Ahora le tocaba el turno al sustituto de Anthony B en el festival, ni mas ni menos que Turbulence. El jamaicano viene sin estar anunciado en el cartel, cosa que provocó algunos comentarios entre el público. Tras un descanso y cambios en el escenario el segundo concierto arrancaba. Batería, bajo, teclados, guitarra y una corista nos dan la bienvenida con una base rítmica mientras escuchamos la voz de Turbulence que desde la trasera de escenario ya está cantando. Reggae al estilo new roots, dancehall pero muy sutil, sin cansar al público con muchos parones en mitad de una canción, si que paraba y volvía a empezar la canciones pero en los momentos en los que el show lo necesitaba. Muy en forma con su voz, cristalina y potente, el público baila y está metido desde el principio en el rollo, buen feeling y ritmo general, hacia tiempo que no disfrutaba un concierto y Turbulence no nos defraudó. Sabiendo defender todos sus hits como “Love can Make”, “Rasta Forever”, “As sure as the sunshin”, “What is words”, “Ready for the world” hasta clásicos del reggae a los que hizo un guiño como “Night Nurse” de Gregory Issacs, “What a Bam Bam” de Toots & The Maytals, “One Love” de Bob Marley, y todo haciendo participar al público cantando, bailando y sintiendo la música, buen concierto. Destacable la labor del bajista que soportaba toda la banda y la simbiosis entre corista y cantante, supieron armonizar y hacer buen trabajo en las voces, Turbulence con una de las mejores voces del reggae actual sigue vibrando alto, impecable.

Tras el bailoteo y después de una horas de feria y festival el publico buscaba un lugar donde sentarse, descansar y porque no fumarse un porro de buena marihuana entre concierto y concierto. Ya solo faltaba la anfitriona de la noche Iseo y su inseparable Dodosound. Hacía tiempo que no veía a los navarros en acción, uno de los grupos sensación en la escena reggae antes de la pandemia. Subieron al escenario pasada la 01h de la madrugada, y con sus Mousehunters, dos saxos, trompeta y flauta travesera comenzaron con una intro preciosa. Dodosound mezclando en directo crema como siempre, sabiendo utilizar sus delays y ambiente ponía la alfombra para que Iseo entrara en escena con esa simpatía y buen rollo que siempre transmite. Repasaron sus temas mas conocidos y en un momento nos sorprendieron con canciones nuevas diciendo que venían directos del estudio, y la verdad que todo sonaba exquisito, aunque personalmente echo en falta una sección rítmica de músicos no hay nada que objetar porque la verdad es que suenan genial. Desde el primer tema se llenó la parte delantera del escenario y se notaba que gran parte de la gente había pagado la entrada para verlos a ellos, ya tienen su publico y no es para menos. Nos hicieron bailar y disfrutar de su reggae suave y melódico que es como estar en un sueño, te hace bailar y sentirte bien, transmite paz. Dos horas de show con los anfitriones y su hit “Vampire” dio por finalizado el concierto al grito de “beste bat!” (otra mas!) del público que quería más. Iseo & Dodosound están en forma y lo demostraron con creces en Irun.

Así con esta buena sensación en el cuerpo la feria del cannabis ExpoGrow se despedía hasta la siguiente edición, esperemos que como siempre apuesten por el reggae y la música jamaicana, buenos humos!