“Dicen que para ser feliz hay que estar lejos de las ciudades grandes, vivir en el campo, en la naturaleza. Pero, cada vez que vengo a Madrid me digo que eso no puede ser. ¿Son felices en Madrid”, preguntaba a un diverso y ensimismado público. Dominique Pinto, Dom La Nena, visitaba la capital de la mano de SON Estrella Galicia como una de las exclusivas fechas de cierre de gira. Esta violochelista brasileña, educada en Argentina y de alma francesa, consigue hacerte conectar con sus raíces, que mientras contemples su directo respires el aire y la tradición de sus tierras.
La sala al completo acabó enamorada de su cercanía y sencillez. Estaban listos para cumplir uno a uno los caprichos de La Nena. Desde imitar el sonido de la lluvia con los dedos hasta levantarse a bailar una samba. Ella, a cambio, les regaló un espectáculo musical íntimo y minimalista en el que, sin una banda de apoyo, consiguió plasmar toda la riqueza musical necesaria para que sus composiciones brillaran como se merecían.
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