Catpeople, para muestra un botón

Ni la crisis actual puede frenar a Catpeople. Contra viento, marea y vuelos cancelados, los gallegos consiguieron llegar a Tenerife para comenzar su gira 2012 y dejarse (musicalmente) “los cojones en el escenario”... Y vaya que si lo hicieron, no había más que ver la camisa del cantante al final del concierto. Durante poco más de una hora el público pudo disfrutar de una cuidada selección de temas que extrajeron de los tres discos que han publicado hasta la fecha. Con un sonido sólido y consolidado que los aleja de las etiquetas que antaño tuvieron, los vigueses alternaron melodías contundentes (“In silence”, “Fat rat”, “Goodbye angel”, “Mexican life” o “Radio”) con momentos de introspección y tranquilidad (“Secret life (A Japanese story)”, “Sorry”, “Behind”). La gente en general -había algún que otro despistado- bailó, sudó, bebió, cantó y ofreció todo lo que se podía esperar en un concierto que sin duda calentó el frío ambiente de la ciudad de Aguere. Fueron interesantes los arreglos a canciones como “Looks like dogs” además de la introducción de una trompeta, detalles que ciertamente aportaron un toque distinto a su repertorio. Con menos teatro en escena y más cuidado por la música, el conjunto se metió en el bolsillo a los presentes, que quizás se quedaron con ganas de un poco más. La banda “dio cera” y defendió con holgura y profesionalidad su nuevo trabajo, "Love Battle", un disco más electrónico que los anteriores que marca claramente un antes y un después en su trayectoria musical. Si hacemos caso del dicho que afirma que para muestra un botón, desde aquí anuncio que estos chicos van a continuar subiendo. Ellos se divirtieron mucho. Y nosotros también.