Sin fronteras

Una nueva edición del Irun Zuzenean Festibala tuvo lugar este fin de semana en el recinto ferial de Ficoba. Al igual que en la edición pasada, dos escenarios paralelos en los Pabellones 2 y 3 permitían dinamizar los preparativos para el transcurso de los conciertos. En el Pabellón 2 además, una mayor presencia de Food Trucks permitió proveer sin demasiadas colas a los más hambrientos que acudieron sin cenar a la cita anual.

El recinto ferial de Ficoba es un lugar privilegiado para alojar un festival de este tipo. Con acceso mediante el Topo de Euskotren a menos de 3 minutos de la entrada, parking gratuito, amplitud de espacio, aire acondicionado en el interior y unos baños en perfectas condiciones se puede hacer frente incluso a las inclemencias meteorológicas, que por suerte no se dieron para mayor comodidad del público.

En la primera jornada del viernes hubo ocasión de ver nada menos que a cuatro bandas más la acposterior de Serial Killerz Dj. En primer lugar se subió al escenario Slimfit, banda local de dark-rock caracterizada por su sonido oscuro. Arrancando con una intro ruidosa y atmosférica, entraron en acción directamente con "Time", tema donde predomina el sonido del Trémolo de guitarra. Le sigue "BLUE", el único tema en el que el vocalista Juanjo Roldán abandonó su guitarra para cantar y dar posteriormente paso a un riff con mucha dosis de distorsión. Sin dar respiro, la banda irunesa continuó su recital con "I Fell In Love", uno de los temas del primer EP "Alive Again", grabado en el estudio Muir, de la mano de Yon Vidaur. Un trabajo excepcional que plasman a la perfección en sus últimos directos.

Comenzando con el segundo bloque, más intimista, las atmósferas envolventes predominaron en "Don't Ask me Why". Con "Please", afloran ecos de los 50, conviviendo con un noisy style que parece homenajear el Via Chicago de Wilco. "Skin" pone fin a este respiro, con su estribillo de ritmo sincopado. En el tema "Clown", que también forma parte del último EP, la guitarra vuelve a una potente distorsión, que no abandonará hasta el final del concierto. El pop de "Lies" da paso a "Surprise" , que vuelve a elevar el nivel de intensidad, combinándola con efectos de reverb que la hacen brillar en su parte final. A esas alturas de concierto aún quedaba margen para elevar la potencia sonora, consiguiéndolo con "Alive Again" y su potente riff de pinceladas stoner, combinadas con capas de sintetizador. Con el público entregado remataban su actuación con "Release my pain", un clásico de sus conciertos que funciona de maravilla como rúbrica final. El cariño de la familia y amigos no se hacía esperar para la banda local, que recibió una explosión de aplausos como broche final a su recital.

Tras el tiempo justo para refrescarse con una bebida e incluso salir a tomar un rato el aire, hace entrada en el escenario del pabellón 3 la banda madrileña Morgan, que a estas alturas podemos definirla ya sin ninguna duda como una de las mejores bandas nacionales de música raíz norteamericana. Su vocalista principal Carolina de Juan, con su rasgado y característico registro de voz se siente especialmente cómoda cantando al piano, como ella misma confesó. El resto de componentes también son dignos de citar dada su relevancia y aportación a la música que emana esta bandaza, aun tan fresca y con tanto futuro por delante.

La formación comenzó su recital con "Alone", del disco "The River and the Stone" de 2021 el cual no pudieron presentar por completo dado el escaso tiempo con el que contaban para su actuación. De este mismo álbum también tocaron "River" como cuarto tema. Las letras pausadas acompañadas por la agudeza de la stratocaster de Paco así como los arreglos al piano de Schulthess imprescindibles en casi todos los temas seguían la base rítmica, acompasándose a la perfección.

La banda continuó su actuación intercalando temas de sus anteriores trabajos "Air" del 2018 y "North" del 2016. Tras "Blue Eyes", "Paranoid Fall", "Praying" y "Sargento de Hierro" que formó el bloque que hizo entrar en calor al público, sonaron "Thank You", "Anhother Road" y "Marry You". El público entregadísimo llegó al nirvana durante la segunda mitad de este concierto que se pasó volando no sólo por la calidad de las letras y la perfecta puesta en escena de Nina, sino por el gusto y la delicadeza de una banda que transmite muchísimo en los solos, tanto de guitarra como de piano. Ojalá hubiese habido tiempo para más.

Era el turno de Grises, viejos amigos del festival que ya tuvieron presencia en ediciones anteriores, celebradas en la plaza San Juan. La banda zestuarra sigue teniendo tirón en el panorama nacional, con un estilo indie pop que les caracterizaba en sus comienzos. Por otro lado, en esta ocasión hizo un directo con más distorsiones y efectos electrónicos que en su anterior visita a la ciudad fronteriza. Comenzaron con su tema "Aspiradora Espacial" para seguir con "Cactus" y "Laberinto", que precedió a su traca más bailada con "Despierto" y sobretodo "Wendy", canción por la que no pasa el tiempo. El público con el bello erizado bailaba desatado con este tema haciendo subir aun más la temperatura del Pabellón 2. Tras "Soles", "El Hombre Bolígrafo" y "Veneno" continuaron con "Animal", otro de sus míticos temas que el público irundarra aun recordaba y bailaba con ganas. Por último "Parfait", de su album "El Hombre Bolígrafo" 2011 ponía broche a la actuación con un público ya acalorado y sediento que se dirigía en masa hacia las barras. Y es que pese al aire acondicionado se notaba una gran diferencia de temperatura entre los pabellones 2 y 3.

A las 22:00 h salían a escena Nada Surf, mítica banda neoyorkina de rock alternativo que recientemente hemos podido ver girar en más ciudades del Estado a lo largo de los últimos años. La banda, formada en 1992 por el vocalista Matthew Caws (guitarra y voz), y el madrileño Daniel Lorca (bajo y voz) hacía su entrada en escena con Popular, uno de sus temas más conocidos que presentaban allá por 1996 en su disco "High/Low". Ha llovido mucho desde entonces y este gran éxito de un himno post adolescente ha evolucionado en una madurez musical y artística en la docena de discos que le han sucedido en estas casi tres décadas (se dice pronto). La traca continuó con "Telescope", "Hi Speed Soul" y "The Plan" con una calidad y ejecución de una banda que a estas alturas de la película se conoce y compenetra perfectamente. La base del batería Ira Elliot parecía llevarla a cabo un reloj suizo pese a la intensidad de la pegada, en perfecta armonía con el bajo de Daniel, que por desgracia se oía a un volumen demasiado bajo.

"Friends Hospitals", "Killians Red", "Looking Through", "Come Get Me" e "Inside of Love" completaron la segunda tanda de temas más melódicos endulzando al público con la calidad vocal de Mattew, siempre afinado, correcto y elegante. A continuación los temas "Happy Kid", "Blonde on Blonde", "Mathilda", "Hyperspace", "Looking for you", "See These Bones" y "Something I should Do" completaron el repertorio, volviendo a la carga con los tres últimos temas "So Much Love", el hit "Always Love" y finalizando su actuación con "Blankest Year".

El público, más que satisfecho con una primera jornada que pienso superó sus expectativas (lo hizo con las mías) se dirigió en gran parte a abandonar el recinto, quedándose a la pinchada de Serial Killerz Dj únicamente los más juerguistas.

A pocos metros de Ficoba se podía ver gente en ambas direcciones. También cruzando el puente de Santiago dirección Francia en lo que fue para mi una sorpresa agradable. Un festival sin fronteras, pensé, pese a que Hendaya es una localidad en la que residen muchos transfronterizos que trabajan a este lado del puente. Realmente con bandas de este nivel pronto empezará a venir gente de San Juan de Luz e incluso Bayona con toda probabilidad, tal y como ya hacen actualmente amantes del directo de localidades guipuzcoanas vecinas como Rentería, Oyarzun o incluso Donostia.