Vivian Maier. En la superficie del espejo

El talento de Vivian Maier –reconocido a título póstumo después de que en 2007 un coleccionista comprase en una subasta cajas llenas de negativos sin revelar de la artista– se merecía una obra como la presente referencia de perfil poético y casi romántico publicada por Garbuix Books. Un tomo que llevase al lector la personalidad retraída y misteriosa de la fotógrafa, con muestras destacadas y representativas de su obra y también algunos pasajes de la vida de la francesa-americana, ya sean estos reales, adornados, o directamente imaginados por parte de la autora.

Paulina Spucches reúne todas estas particiones en torno al presente cómic, “Vivian Maier. En la superficie del espejo”, manteniendo una estructura interesante que en la práctica funciona con agradecida sencillez visual y estructural. La parisina parte, en cada capítulo, de una fotografía tomada por Maier, para elucubrar con la historia escondida tras la misma: desde un grupo de borrachos a una visita turística de amigas, pasando por un limpiabotas o amistades de la propia Maier. El mismo argumento sirve a la dibujante cuando se trata de despejar retazos acerca de la vida de la protagonista, en un puzle bien diseñado que, en conjunto, haría las veces de biografía ligera.

Todo, al amparo de un trazo marcado con determinación por las acuarelas que ilustran cada viñeta, dando vida a una historia tan sobria como intrigante en torno a la que está considerada como una de las fotógrafas más reveladoras del pulso urbano y cotidiano del Nueva York de los cincuenta, si bien también tienen cabida clichés de Chicago o Saint Bonnet. Estimulada y motivada tras ver el documental “Buscando a Vivian Maier” (John Maloof y Charlie Siskel, 2013), Spucches aporta la óptica de una respetuosa admiradora el respecto del recóndito prisma creativo de Maier, en un volumen en el que merece la pena adentrarse con manifiesta calma y curiosidad.