Repasamos los discos de Queens Of The Stone Age del peor al mejor
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Repasamos los discos de Queens Of The Stone Age del peor al mejor

Sergio Ariza — 05-07-2023

Ahora que los Queens Of The Stone Age están a punto de volver a desembarcar en España para presentar su octavo disco, "In Times New Roman", es un momento perfecto para repasar la discografía de la banda de Josh Homme y catalogar sus ocho discos de estudio de peor (o menos bueno) a mejor (o excelente).

 

Era Vulgaris (Interscope, 2007)

Es imposible no hablar de las míticas “Desert Sessions” cuando se habla de Josh Homme y los Queens Of The Stone Age, sesiones de improvisación y desenfreno en las que Homme se llevaba al estudio Rancho de la Luna, en medio del desierto, a otros músicos para grabar con ellos. Por ejemplo PJ Harvey que participó en los volúmenes 9 y 10 de las mismas, que siguen siendo los mejores, y en los que se grabó por primera vez parte del material que aparecería en este disco, como uno de los grandes clásicos de la banda "(I Wanna) Make It With Chu". Es normal que suene un poco deslavazado y menos inspirado de lo habitual, es un poco un disco cajón de sastre, eso sí, cuenta con canciones interesantes como la mencionada, "Sick, Sick, Sick" o "3's & 7's".

 

Villains (Matador, 2017)

La presencia de Mark Ronson en la producción ya hizo que muchos fans vieran este disco con mucha suspicacia, aun así he de reconocer que a mí me gusta bastante, puede que las guitarras suenen menos duras de lo habitual, pero Homme seguía fiel a sí mismo, esta vez además de Black Sabbath y los Stooges también aparecía su enorme deuda con el rock & roll original de los 50, Homme no había atravesado ninguna tragedia y, sencillamente, quería salir a la pista de baile, a pasárselo bien. Puede que no está a la altura de "Songs For Dhe Deaf" o "...Like Clockwork" pero es un disco muy divertido y "The Evil Has Landed", una de sus grandes canciones.

 

Queens Of The Stone Age (Loosegroove, 1998)

Josh Homme intenta salir de la sombra de Kyuss y el Stoner Rock y lo consigue totalmente, logrando un sonido totalmente reconocible en el que las guitarras y los riffs siguen sonando duras como la piedra pero las melodías son más flexibles y pop, creando un sonido más hipnótico y elegante, las influencias están claras, los Stooges están tatuados a fuego, como se nota en "If Only", un plagio/homenaje a "I Wanna Be Your Dog" mientras que el resto suena como si Black Sabbath hubiera hecho una jam con los Neu! y los Can. Es curioso que Homme aceptase la comparación con los grupos krautrock a pesar de que decía no haberlos escuchado todavía. El inicio del disco es apabullante, "Regular John", "Avon" e "If Only" son un triunvirato imparable que eleva al disco. Aunque la segunda cara no alcanza la misma altura tiene algunos temas notables como la pesada "Mexicola" o la inquietante "You Can't Quit Me Baby" que ya avisaba que había otras caras ocultas en la música de Homme.

 

In Times New Roman (Matador, 2023)

Los cielos se vuelven a oscurecer para Homme y los tiempos no están para bailar como en "Villains", así que vuelve cierto primitivismo y crudeza a la ecuación con un Homme tratando de ajustarse al hecho de que su matrimonio ha terminado de la peor forma posible y hay varios amigos caídos por el camino. "Obscenery" y "Paper Machete" son un gran inicio, la primera es dura y oscura mientras que la segunda parece la descendiente de "Little Sister", es una nueva actualización de su cara más Sabbath y su lado más Stooges. El disco suena claustrofóbico y furioso, con un Homme especialmente brillante en la voz, pero puede que le falte algún futuro clásico más, aparte del primer sencillo, "Emotion Sickness", para estar un poco más arriba en esta lista. Aun así una brillante actualización de su sonido de siempre que suena compacto y oscuro, con algún giro psicodélico.

 

Lullabies To Paralyze (Interscope, 2005)

Habían pasado tres años desde "Songs For The Deaf" pero "This Lullaby" retomaba el hilo justo donde lo había dejado "Mosquito Song". Eso sí, ya no estaban ni Oliveri, ni Grohl y Lannegan aparecía muy poco. En su momento fue visto como un pequeño resbalón, pero es que veníamos desde un discazo histórico. Es evidente que es un disco continuista con aquella obra maestra pero "Lullabies To Paralyze" es un gran disco por cuenta propia que gana si no lo comparamos con su hermano mayor. "Burn The Witch", "In My Head" y "Little Sister", su momento más pop y pegadizo, son clásicos absolutos de la banda pero es que canciones como "Medication", "Long Slow Goodbye", "I Never Came", con un excelente Homme al falsete, o "Everybody Knows That You're Insabe", su recado de despedida a Oliveri, están también muy bien.

 

Rated R (Interscope, 2000)

En el año 2000 apareció el primero de sus tres discos absolutamente imprescindibles, “Rated R”. Frente al rock monolítico (este sí de la Edad de Piedra) de Kyuss, Homme se abría a una mayor amplitud de estilos y entregaba unas composiciones cada vez mejores. El inicio con "Feel Good Hit of the Summer" y "The Lost Art of Keeping a Secret" es el mejor de toda su carrera, con la primera siendo una oda punk metal, como si Motörhead y Nirvana hubieran decidido unir fuerzas, a la dieta tóxica de Homme en sus viajes al desierto, y la segunda siendo un gran ejemplo de su sonido, con unas estrofas amenazantes y más pausadas que se rompen en un estribillo majestuoso en el que Homme saca a relucir su falsete, nunca un tipo que comenzó como guitarrista ha terminado convirtiéndose en un cantante tan extraordinario. Eso sí, más allá de sus dos canciones fundamentales "Rated R" es un monstruo absoluto en el que se estrena el fundamental Nick Oliveri, tocando el bajo y cantando tres canciones, entre ellas la excelente "Auto Pilot", además de contar con la primera aparición de Mark Lannegan. El disco con el que se encontraron definitivamente y marcó en piedra, nunca mejor dicho, su sonido.

 

...Like Clockwork (Matador, 2013)

Cuando parecía que ya no iba a haber un nuevo disco de Queens Of The Stone Age, los de Homme reaparecieron, tras seis años de parón, con uno de sus clásicos absolutos. "...Like Clockwork" fue la forma que tuvo Homme de lidiar con la depresión y la oscuridad que siguió al momento en el que casi pierde la vida tras una intervención quirúrgica en su rodilla. Es un disco oscuro e intenso que contiene algunas de las mejores canciones de su carrera como "If I Had A Tail", como si Phil SPector le hubiera dado "Da Doo Run Run" a Alice Cooper en vez de a las Crystals; "I Sat By The Ocean", un fabuloso tema en la que utilizan un contraste entre la música y melodía, animadas, y la letra, triste y melancólica; "My God Is The Sun", con uno de sus riffs más icónicos; "I Appear Missing", que suena increíblemente amenazante; "Smooth Sailing", con otro de esos falsetes marca de la casa, o "The Vampyre of Time and Memory", donde Homme se luce también en los momentos más lentos dando un nuevo sonido y amplitud a su música, logrando por el camino el mejor disco de rock de la segunda década del Siglo XXI.

 

Songs For The Deaf (Interscope, 2002)

Sí, no podía ser de otra forma, "Songs For The Deaf" sigue siendo el mejor disco de su carrera, es evidente que contar con una alineación de ensueño, Dave Grohl a la batería, NIck Oliveri al bajo, Mark Lannegan cantando y echando una mano en la composición, es un extra pero aquí, como en toda su carrera, el verdadero capitán sigue siendo un Homme con las ideas muy claras, convirtiendo a su guitarra en la marca distintiva, con potentes y pesados riffs que sonaban como si Tony Iommi se hubiera criado escuchando a Nirvana. El otro elemento que cohesionó el disco fue la idea de Oliveri de unirlo a través de breves extractos de falsas radios, haciendo de él una especie de disco conceptual sobre un viaje en coche desde Los Ángeles al desierto de Mojave. Con ello consiguieron una obra mucho más compacta y el disco perfecto para escuchar a todo volumen mientras se conduce. "No One Knows", la mejor canción de su carrera, "First It Giveth", con otro riff marca de la casa, "A Song for the Dead", oscura y pesada, "Hangin' Tree", un perfecto vehículo para la voz de Lannegan, "Go with the Flow", donde vuelven los ecos de los Stooges, "Another Love Song", una canción infravalorada, pegadiza y pop que es mi canción favorita cantada por Oliveri, o el cierre acústico con "Mosquito Song" (en la que ya se adelanta el nombre del siguiente disco), este es uno de los viajes fundamentales de la música rock del Siglo XXI.

 

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