Tengo entendido que tu hermano Arnaldo y tú crecisteis en un ambiente muy musical ¿cómo recuerdas tu infancia?
Nací y crecí en una familia eminentemente musical, sí. Mi madre fue una gran pianista, solía tocar en casa entre doce y catorce horas diarias... y mi padre fue un gran poeta y un estupendo cantante, pero se metió en política para ganar dinero y cuidar de nosotros. Fuimos muy privilegiados, estábamos siempre rodeados de arte. Íbamos a la ópera los fines de semana y siempre venía gente a casa que cantaba o tocaba o recitaba poesía.
¿Cuando empezasteis tu hermano y tú a hacer vuestra propia música?
En realidad al principio comencé a tocar yo solo, porque Arnaldo es un poco mayor que yo y con ciertas edades una diferencia de tres años se nota mucho. En aquella época ni siquiera salíamos juntos, él tenía su grupo de amigos con los que tocaba. Yo veía lo que hacían ellos y como tenía una guitarra acústica empecé a tocar por mi cuenta. Cuando tenía trece años le dije a mi madre que quería ser profesional y ella me dijo: "Muy bien, pero si quieres ser profesional tienes que trabajar y ganar dinero". Así que empecé a dar clases a otros chicos, porque realmente se me daba muy bien, y en unos pocos meses empecé a ganar más dinero que el que me daban ellos.
¿Y cómo y cuando conocéis a Rita Lee?
Rita era muy amiga de Raphael (Vilardi), un amigo de mi otro hermano, Claudio. Por aquel entonces ella tenía otra banda que se llamaba Teenage Singers, una banda de sólo de chicas. Ella tocaba la batería y Suely Chagas era la cantante. Raphael y Arnaldo también tenían una banda, Six Sided Rockers, y se juntaron para tocar todos juntos. Había también un tipo que tocaba el piano con ellos, Túlio, que decidió dejarlo. Entonces me llamaron a mí para que me uniera al grupo. Raphael pasó a tocar los teclados y yo cogí el puesto de guitarrista. Me pasó todos los acordes y... ¿sabes qué? Los guitarristas estamos llenos de ego... Raphael fue la primera persona que me hizo darme cuenta de ello. Yo me creía muy bueno, pero al llegar a la banda me di cuenta de que por aquel entonces todavía era incapaz de tocar como él. Así que seguí mejorando. Con el tiempo el grupo se disolvió y sólo quedamos Rita, Arnaldo y yo. Así fue como nacieron Os Mutantes.
"Para nosotros todo era diversión, no había presión"
¿Es cierto que decidisteis vuestro nombre para actuar en el programa para adolescentes de la televisión brasileña "O Pequeno Mundo de Ronnie Von"?
Para nosotros todo era diversión, no había presión. Sabíamos lo que éramos y sabíamos que éramos buenos. En aquel programa salían muchas bandas que hacían versiones de "I Wana Hold Your Hand" en portugués y cosas por el estilo. Nosotros tocábamos nuestra propia música. Estábamos tan lejos de los demás en términos de técnica y conocimiento... Por ejemplo, yo solía tocar "Rondo alla turca" de Mozart y piezas realmente difíciles sólo para practicar. También solíamos cantar Bach a capella los tres juntos. Estábamos muy seguros de nosotros mismos. Yo nunca me he sentido nervioso antes de salir al escenario, creo que es el momento en el que me siento más yo mismo.
Poco después conocéis a Gilberto Gil, que es quién os introduce en la movimiento Tropicália...
Le conocimos durante una grabación. Parecía estar buscando algo y en cuando nos vio nos propuso que tocásemos con él en el Festival de Música Popular Brasileira que se emitía en TV Record. Al principio no nos interesó mucho, porque era una especie de competición y eso para nosotros no tenía ningún sentido. Pero luego lo pensamos mejor... toda la música de Brasil iba a estar allí... era algo tan nuevo para nosotros. Así que decimos hacerlo. Con Gilberto congeniamos inmediatamente, como pegamento. ¡Al final quedamos segundos!
¿Cómo ves con el paso del tiempo toda aquella explosión cultural de la escena tropicalista?
Yo creo que Os Mutantes fuimos la piedra angular del Tropicalismo, sin nosotros nada hubiera pasado. Nosotros éramos el prisma que tenía todos los colores. Conocíamos a The Ventures, el jazz, twist... sabíamos mucho. Eramos muy brasileños, pero muy abiertos al mundo. Después conocimos a (Rogério) Duprat, que fue otro de los genios detrás de todo aquello. Era el George Martin de la Tropicália. Conocerle nos permitió explorar nuestra creatividad a niveles increíbles. Podíamos utilizar una orquesta, lo que fuera. Escribíamos lo que queríamos y cómo queríamos. Él nos entendió perfectamente. Fue una conjunción perfecta en el tiempo y el espacio: Caetano (Veloso), Gil y Os Mutantes ¡Qué bello triángulo!
Vuestro estilo de vida os situó en el punto de mira de la dictadura militar de Brasil. Tanto Caetano Veloso como Gilberto Gil fueron detenidos y tuvieron que exiliarse... ¿Cómo conseguisteis evitar vosotros el mismo destino?
Ellos eran muy feos (risas). Nosotros éramos demasiado monos, muy jóvenes. Rita era rubia con los ojos azules, muy guapa, y nosotros éramos unos críos... no podían acusarnos de ser terroristas. Podían acusarnos de ser de izquierdas, pero al mismo tiempo yo llevaba una chaqueta con la bandera de Estados Unidos porque la había visto en "Easy Rider"... Yo creo que no sabían como catalogarnos. Éramos como niños anarquistas.
¿Qué te pareció cuando Gilberto Gil se convirtió en Ministro de Cultura en el gobierno de Lula?
Creo que Gilberto como Ministro de Cultura es un excelente cantante y compositor. No tienes ni idea de lo que podía haber hecho. Podía haber acabado con la corrupción en el negocio de la música. Tenía tantas expectativas puestas en él... y yo lo dije públicamente en los medios. Podía haber acabado con muchas cosas en cuestión de segundos y no lo hizo. Y no soy capaz de entender porque. Me sentí muy decepcionado.
"Gilberto como Ministro de Cultura podía haber acabado con la corrupción en el negocio de la música"
Volviendo a Os Mutantes, en 1972 tanto Rita como Arnaldo deciden dejar la banda, ¿Los problemas entre ellos eran muy graves en aquel momento?
Lo que ocurrió es que empezamos a tomar mucho ácido, aunque también había algo de celos por parte de Rita o algo parecido. Practicaban el amor libre y eso es algo que no es siempre fácil. Para mi cuando Rita y Arnaldo decidieron dejar la banda fue un shock. Me quedé en un estado de transición en el que no sabía que hacer. Para mí fue como si dos amigos hubiesen muerto y tenía que confrontarlo.
En cualquier caso, encontraste fuerzas para seguir adelante con Os Mutantes tú solo...
Sí, me fui a Estados Unidos para aprender todo lo que necesitaba saber. Aprendí a hablar inglés, busqué nuevos músicos y empecé a componer de nuevo. En "Tudo foi feito pelo sol" (Som Livre, 74) lo hice todo yo sólo. Me sentía libre para tocar más profundo. Es un disco fantástico, uno de los mejores y más respetados álbumes de Os Mutantes. Es del que más copias se han vendido.
A partir de los años 90 se despierta, sobre todo en EEUU, un interés renovado en vuestra música. Kurt Cobain incluso pidió públicamente que os reunierais ¿Es verdad que llegó a escribirle una carta a tu hermano?
Sí, es verdad, pero yo no lo sabía. Yo no estaba en el país en aquel momento. No me enteré de ello hasta tiempo después... Me pareció impresionante.
Alguien también muy importante para este "revival" fue el líder de Talking Heads, David Byrne, que publicó un recopilatorio de Os Mutantes a través de su propio sello, ¿Cómo surgió aquello?
David Byrne me llamó porque quería publicar una recopilación de nuestra música en su sello de world music Luaka Bop. Yo ya le había conocido antes, hace muchísimo tiempo, cuando tocaba en el CBGB con Tina (Weymouth) al bajo. Teníamos amigos comunes, y alguna vez habíamos salido por ahí juntos cuando estaba en Nueva York. En una ocasión durante una cena le escribí una lista de canciones en una servilleta, y le dije que si hacía la recopilación debería poner esta y esta otra... porque eran las más raras, las más interesantes... y eso se convirtió en "Everything Is Possible: The Best of Os Mutantes" (Luaka Bop labe, 99).
En cualquier caso, no volvisteis a tocar juntos hasta el 2006, durante la exposición retrospectiva sobre Tropicalia que organizó el Barbican Arts Centre de Londres. ¿Cómo fue aquella experiencia?
Cuando nos reunimos para tocar en el Barbarican en Londres, yo pensaba que el público tendría mi edad y cuando llegamos ¡eran todos niños! ¡Y les encantábamos! Os Mutantes se ha convertido en algo mucho más grande que nosotros mismos.
Además en 2008, "A Minha Menina", vuestra canción más emblemática, se utilizó en un anuncio de McDonald's ¿Cómo te hace eso sentir?
Creo que es genial, maravilloso. Y no sólo eso. También salió en los anuncios de la Copa del Mundo, creo... fútbol... es la vida, es fútbol ¿Habéis visto que hoy han detenido a más gente de la FIFA? (risas)
¿Qué te parece que haya tantas bandas en todo el mundo que nombren a Os Mutantes como una de sus mayores influencias?
No le presto demasiada atención a esas cosas. Una vez Sean Lennon me mandó una carta preguntándome quién me había influido (risas) y yo era como "Joder, ¡pues tu padre!" (risas) y Paul y George (risas). Otra vez conocí a Beck, que es un tipo genial, y a Devendra (Banhart)... Pero bueno, lo más importante para mí... Mira hace poco, por ejemplo, estábamos tocando en Brasil, en el sur, cuando un chico de una banda local se acercó a mí... y estaba temblando. Yo pensaba que se estaba riendo... pero estaba llorando. No me había dado cuenta de lo emocionado que estaba. Eso es un auténtica bendición.
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.