Opiniones 15M (8): Nacho Vegas

¿Qué sociedad y qué políticos quieres tú? Traza tres rasgos de tus hartazgos, tus protestas, tus deseos, siguiendo la estela de los grupos alzados en protestas públicas.
1. Estoy harto de todos los políticos que no gobiernan escuchando al pueblo y que además son responsables y cómplices de todas las injusticias.
2. Me gustaría que hubiera una sociedad en la que la gente normal, la que se está movilizando con indignación, pudiera tomar decisiones, pues eso sería lo más parecido a la democracia real.
3. Me gustaría que hubiera o se llegara a una sociedad en la que primara la autogestión responsable.

Años y años reprochando a los jóvenes su “pasotismo”, y cuando reaccionan también se les reprocha… ¿Qué pasa en España?
Esto es algo que yo he hablado mucho con amigos, y no es nada nuevo, siempre ha ocurrido. Además, desde hace años se nos viene diciendo que vivimos por encima de nuestras posibilidades, pero lo cierto es que la gente ya se ha empezado a hartar de eso: todo esto es una reacción a las medidas de los políticos, que aplican recortes sociales mientras los causantes de la crisis consiguen beneficios.

Nadie espera que esta Spanish Revolution prospere… ¿Tú que opinas?
Yo creo que es el principio de algo. Algo se ha puesto en marcha. El miércoles 18 llegué a Madrid, y cuando pasé por la Puerta del Sol flipé con lo que tal había allí, y quiero ser optimista por una vez, y después de tanto pesimismo creo que hay que verlo como un signo de algo bueno.

Entre los grupos movilizados estos días (#15M, Democracia Real Ya, No les votes, Jóvenes sin futuro, Spanish Revolution, etc…), unos piden el cambio del sistema electoral, el fin del monopolio político-financiero, la anulación de la ley Sinde, la legalización del hachís… ¿Por dónde hay que empezar?
Creo que en realidad lo que une a todos cuantos se movilizan es el convencimiento de que el sistema no funciona, no sólo no funciona sino que además está jodiendo a la mayoría de la gente. Por eso habría que intentar cambiarlo. Se está viendo que el capitalismo forma burbujas que crean riquezas, pero que se las reparten muy pocos. Por ahí habría que empezar. Y las consignas de las pancartas y carteles que se ven en las acampadas pueden dar pistas: no somos antisistema, el sistema es anti nosotros.

¿Qué cosas habría que cambiar de cara a las próximas elecciones generales (no las del domingo)?
Ahora es un momento para estar, al menos yo, a la expectativa, porque soy optimista ante lo que está ocurriendo, y creo que puede generar cambios. Pero no sé exactamente lo que va a pasar. Sí que me gustaría que se produjera un vuelco real, que todas las pérdidas que se están socializando mientras los beneficios se van privatizando se voltearan. Y que toda la riqueza generada de manera fraudulenta volviera al pueblo, y que cargaran con las pérdidas los culpables de todo lo que está pasando. Al final todo se trata de un reparto justo de riqueza. Lo malo es que los políticos no tienen ninguna capacidad de maniobra, están en manos de organismos supranacionales que son los que deciden cómo se reparte el dinero, y muy alejados de la gente a la que tendrían que representar. La democracia está muy maltrecha y por eso se reclama una democracia real.

¿Qué le dirías a un político nacional, o a un alto consejero de una entidad bancaria si pudieras almorzar con él?
La verdad es que no tengo ninguna gana de almorzar con ningún capo de un banco. Pero viendo que cuando los altos directivos del Banco Santander o de Telefónica se reparten primas por los beneficios millonarios y ninguno usa el dinero para no tener que echar a la calle a cientos de personas, si pudiera comer con César Alierta lo que me gustaría sería escupirle a la cara.

¿Hacia dónde habría que llevar toda esta energía, emoción y ganas de cambio?
Pues es complicado de responder, pero viendo que hemos pasado de unos años derrotistas a este momento de ilusión por cambiar las cosas, espero que vaya hacia un mundo más justo, y que paguen los que nos han jodido. Antes se decía que las crisis siempre traían algo bueno, y ahora quizá esta ilusión que nace de la indignación nos lleve a ese lado bueno en todos los aspectos, sociales, culturales…

¿Pueden acabar las redes sociales “twitter, facebook” con un gobierno? ¿Se acabó el dominio de los medios de comunicación tradicionales como 4º poder?
La verdad es que las redes sociales están teniendo un papel muy importante, pero recuerdo la primera movilización antiglobalización que ocurrió en Seattle en 1999 y fue también muy espontánea, o la que hubo tras el 11-M, también espontánea. Todas se apoyaron en redes y nuevas tecnologías como herramientas para comunicarse, pero no se pueden valorar como buenas o malas en sí mismas sin darles un uso. Movilizar de una manera ejemplar y eficaz, no como partidos jerarquizados, sino con estructuras más horizontales y democráticas, es un buen uso.