Lemmy, rock'n'roll animal
EspecialesMotörhead

Lemmy, rock'n'roll animal

Luis J. Menéndez — 29-12-2015
Fotografía — Archivo

 

El legado de Lemmy en 10 canciones

 

“Motörhead”

 "Kings of Speed" Hawkwind (1975) / "Motörhead" (1977)

La última canción que Lemmy escribiría para Hawkwind antes de reciir la carta de despido fue también toda una declaración de intenciones de aquello en lo que debía convertirse su proyecto en solitario. En sus propias palabras: “Ruidoso, rápido, urbano, rápido, estridente , arrogante , paranoico, rock’n’roll para freaks de la velocidad”.


 

"White Line Fever"

“Motörhead” (1977)

El primer tema que escribió específicamente para su nueva banda, se publicó en un single junto a “Leaving Hear” y acabaría formando parte de su disco de debut. Años después lemy explicaría que no se trata de una letra sobre meterse rayas sino algo así como una canción de amor sobre sentirse destrozado, jodido, hecho mierda


 

 

“Overkill”

“Overkill” (1979)

El antecedente más evidente de lo que luego cristalizaría en “Ace Of Spades”: una batería que parece una locomotora a punto de explotar, riffs inmisericordes y un Lemmy que ladra más que canta. Además marca el idilio de motörhead con los programas musicales de gran audiencia, y su presencia en Top Of The Pops interpretando este tema en buena medida supone el despegue del grupo.


 

 

"Stay Clean"

“Overkill” (1979)

Tal vez recordaremos siempre a Lemmy por sus excesos, por representar el prototipo de rockero mujeriego y aficionado a la bebida que ha hecho de la diversión (encima y del escenario y también cuando lo abandonaba) la razón de ser de su vida. Pero Motörhead también tiene himnos straight edge, o cuando menos que parecen advertirles a los chavales que lo mejor es mantenerse lejos de los problemas. "Stay clean and listen to your parents" dice aquí un Lemmy sorprendentemente paternalista.


 

 

"Bomber"

“Bomber” (1979)

Uno de los mejores ejemplos en forma de canción de la conocida obsesión de Lemmy por la II Guerra Mundial. Inspirada en libro del mismo título de Len Deighton en el que se describen los bombardeos nazis, fue el primer tema en el que Motörhead trataron el tema.


 

 

“Ace Of Spades”

“Ace of Spades” (1980)

Qué decir de un tema que representa por sí sólo a todo un género. Rock’n’Roll hipervitaminado y un himno ludópata que pone de acuerdo a rockers, punks y metaleros. Para Lemmy, posiblemente hastaiado de que “Ace Of Spades” se haya convertido en la insignia de Motörhead durante más de tres décadas “it's just fucking another song”.


 

 

"Marching Off to War"

“Another Perfect Day” (1983)

Más “marchas militares”, en este caso en su sexto disco, el que suupuso su divorcio con su discográfica de toda la vida, Bronze, por desavenencias en la manera en la que se estaba gestionando la carrera del grupo. También fue en primer disco en el que hubo cambios en la formación clásica, lo que condiciona el sonido, marcado ahora por el hard más aires clásicos de Brian Robertson de Thin Lizzy a las seis cuerdas.


 

 

"Hellraiser"

“March ör Die” (1992)

Otra etapa totalmente diferente para la banda, que obviamente había ido perdiendo influencia progresivamente frente a las nuevas oleadas de grupos. Curiosamente Motrhead tenían todas las papeletas ppara ser reivindicados por las nuevas generaciones de Seattle como Mudhoney o TAD, pero su influencia pasó más bien inadvertida en aquel momento. En vez de ellos quien descolgó el teléfono fue su viejo amigo Ozzy Osbourne, que le pidió ayuda a Lemmy con lo que sería “No More Tears”. De aquellas sesiones surgió “v”, que Motörhead regrabaron en “March ör Die”.


 

 

“Shake Your Blood”

“Probot” (2004)

Esa reivindicación por parte del grunge tardaría en llegar, pero finalmente se haría realidad cuando Dave Grohl (quién si no) convocó a Lemmy para participar en el primer y único álbum de Probot, en el que el ex Nirvana convocaba a algunos de sus cantantes de metal favoritos de la Historia.


 

"Thunder & Lightning"

"Bad Magic" (2015)

El propio Lemmy lo eligió como su tema favorito del último disco de Motörhead “Bad Magic”, publicado en 2015 y en el que el trío simplemente volvió a hacer lo que mejor sabe: rock’n’roll a toda pastilla.

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