Especial 25 aniversario del "When The Pawn..." de Fiona Apple
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Especial 25 aniversario del "When The Pawn..." de Fiona Apple

Sergio Ariza — 05-01-2025
Empresa — Epic / Sony
Fotografía — Carátula del disco

Se cumplen 25 años de la aparición del segundo disco de Fiona Apple, "When the pawn hits the conflicts he thinks like a king / What he knows throws the blows when he goes to the fight / And he’ll win the whole thing ‘fore he enters the ring / There’s no body to batter when your mind is your might / So when you go solo, you hold your own hand / And remember that depth is the greatest of heights / And if you know where you stand, then you know where to land / And if you fall it won’t matter, cuz you’ll know that you’re right".

Sí, ese era el título completo del disco, aunque a partir de ahora pasaré a referirme a él como "When the pawn..." para que este artículo no pase al Libro de los Guinness de los Récords, como lo hizo el título del mismo, por ser el más largo...

Así que, como decía, "When The Pawn..." cumple 25 años, y, al igual que su autora, sigue creciendo cada día en veneración y estima, siendo uno de los mejores discos de su década, a pesar de que en su momento recibió varias críticas malas. Y es que Fiona Apple siempre se vio escudriñada por la mirada masculina con la que se veía el mundo y este era incapaz de comprender a una mujer que hablaba de cosas femeninas con una mirada propia.

Se puede ver a este disco como la obra en la que Fiona Apple se descubrió finalmente a sí misma, a su voz, a su estilo, y lo hizo destrozando la mirada masculina a través de la cual se la veía después de su debut, “Tidal”. Y es que hasta el propio título del disco, el poema que puse al principio, era una reacción de la cantante después de un artículo desfavorable en la revista Spin. Como decía ella misma, “apareció después de que se rieran de mí y, por supuesto, se convirtió en una cosa por la que se volvieron a reír de mí...”

Haciendo buenas las promesas

Con "When The Pawn..." hacía buenas las promesas que había levantado "Tidal", pero mientras en su primera obra todavía se estaba buscando a sí misma aquí ya se ha encontrado totalmente, algo bastante sorprendente, porque hay que recordar que Apple acababa de cumplir 22 años cuando el disco apareció en las tiendas. Desde que había aparecido "Tidal" había recibido una catarata de críticas, muchas de ellas por, supuestamente, sexualizar su imagen en el vídeo de "Criminal", Apple no duda en responder en varias de las canciones de este disco, tanto a detractores como a críticos, así en "Limp" suelto eso de "saludando y sonriendo, acaricias mi gatillo, luego culpas a mi pistola" o hace referencia a cómo son vistos sus problemas mentales "quieres que me ponga enferma / quieres lamer mis heridas / ¿no es así, cariño?".

Contando con la ayuda del imprescindible Jon Brion, en las tareas de producción, Fiona Apple se saca de la manga su primera obra maestra (a partir de aquí todos sus discos lo son), conjugando sencillos tan irresistibles como "Paper Bag" o "Fast As You Can", con otras canciones inolvidables como "On The Bound", "Limp", "Get Gone" o el emocionante final con "I Know".

Como se fue haciendo más habitual en su carrera, Apple se tomó su tiempo en sacar su segundo disco, tres años que parecen pocos si los comparamos con los ocho que hay entre "The Idler Wheel..." y "Fetch The Belt Cutters", pero que en los años 90 parecían un mundo. Y es que, como siempre iba a hacer en el resto de su carrera, Apple no se metió en el estudio hasta que tuvo las canciones que quería sacar. En este caso Apple compuso las 10 canciones que aparecen en el disco, el poema que le da título y se plantó en casa de Jon Brion y le dijo que tenía un disco y quería que él lo produjese. Le pasó una carpeta con diez canciones, letras escritas a mano, el título completo del disco, ya en su sitio, y le dijo: "Quiero sentarme y tocarlas, y así podremos hablar después en lugar de hablar después de cada canción". Y se puso a tocarle el disco al completo al piano. Brion se sentó con las piernas cruzadas al lado del piano y escuchó arrebatado el recital. Sigue hablando de ello como una de las grandes experiencias de su vida.

La colaboración con Brion

Nada más terminar Apple le dijo: "Creo que he descubierto en qué soy buena. Escribo bastante bien, soy buena cantante y puedo tocar mis canciones bastante bien al piano. Tú eres bueno en todo lo demás. Así que creo que así es como deberíamos proceder, y si alguna vez nos equivocamos, te lo haré saber". Brion se lo tomó al pie de la letra y el disco se grabó así, primero se hacían las tomas de Fiona cantando y tocando el piano y luego él las iba revistiendo, primero la batería y luego los demás toques. Pero siempre bajo las indicaciones y las sugerencias de Apple que iba escuchando todo lo que se grababa y diciendo que se quedaba y que no.

"When The Pawn..." es un disco mucho más maduro y cohesionado de principio a fin que "Tidal", demostrando que Fiona ha alcanzado la plenitud artística. El disco se abría con "On The Bound", con un arreglo de cuerdas que podría aparecer en una película de James Bond, pero con un punto diferente, más angular, más suyo. La canción no sintroduce en la complicada relación que estaba manteniendo en esos momentos con el cineasta Paul Thomas Anderson, a pesar de que el estribillo es solo Fiona gruñendo "You're all I need", una y otra vez, es un estribillo brutal y pegadizo, y suena rabioso y furioso. El final instrumental es una maravilla que deja ver la complicidad entre Apple y Brion.

Apple entrega estribillos irresistibles como los de "Paper Bag" o "Get Gone", pero no se olvida del pop de cámara, como en "Love Ridden", otra canción que se beneficia de un gran arreglo de Brion y otra incisiva letra de Apple: "Solo besos en la mejilla a partir de ahora, en breve solo tendremos que saludarnos con la mano (Only kisses on the cheek from now on and in a little while, we’ll only have to wave)". En "Paper Bag", esta hija y nieta de músicos y artistas demuestra que es tan descendiente de John Lennon y Paul McCartney como de Cole Porter y George Gershwin.

Entre el Great American Songbook y Dylan

Y es que en este disco se nota su familiaridad con el "Great American Songbook" pero también ese torrente lírico surreal y cínico que la emparenta con el Dylan de mediados de los 60. En "A Mistake" también se nota que escucha el hip hop de su época pero, a la vez, todo sigue sonando propio por los cuatro costados. Canciones como "Fast As You Can" con sus continuos cambios de ritmo parecen contrapuestas a gemas delicadas como esa preciosidad que parece que se va a romper que es "Get Gone" y que va creciendo en intensidad, con Fiona admitiendo que su relación actual no es buena para ella y conduce a un ciclo de toxicidad.

Y luego llega ese final antológico que es "I Know", con su ambiente como de club de jazz nocturno, con escobillas y contrabajo, apoyando a su voz y a su piano, al que poco a poco se van uniendo las maravillosas cuerdas. Su voz tiembla y acaricia a la vez, hay una cierta resignación sobre una relación que se desmorona. La guinda llega al final cuando Fiona canta "And if it gets too late / for me to wait / for you to find you love me and tell me so / it’s okay / don’t need to say it... (Y si se me hace demasiado tarde / para esperar / a que descubras que me quieres y me lo digas / no pasa nada / no hace falta que lo digas...)", y parece que va a decir ese "Lo sé" del título pero no lo hace, y en ese silencio, en el que deja claro que no se siente amada y que quiere escuchar ese "te quiero" que no llega, hay más verdad que en mil palabras, puro genio musical.

Por supuesto, en la época, ante un disco de semejante altura, muchos críticos, todos ellos hombres, decidieron que era un gran disco, eso sí, con una condescendencia absoluta, sí estaban ante un gran disco, pero qué más daba sólo era una chica en un mundo de hombres. Así Rob Sheffield parecía poner exactamente lo que pensaba en su crítica: "pero si encuentras a esta mala semilla de veintidós años intolerablemente autoindulgente y estabas deseando que se estrellara y se hundiera con un humillante segundo disco -admítelo, lo estabas- has perdido".

La ‘problemática Señora Apple’

Peor todavía fue la infame crítica de Piers Martin en el NME: "¿Y cómo quieres tu emoción? ¿Cruda? ¿Desnuda? ¿Intensa? Brrr. Es un terreno gélido en el que operan las multimillonarias reinas del hielo de la autocomplaciente angustia cosmética de Ally McBeal, pero hay que reconocer que el estrafalario equipo de Tori, Alanis y la problemática Señora Apple conoce su mercado". Lo que básicamente se traducía en "Oh, anatema, una mujer hablando de cosas de mujeres, seguro que tiene la regla". Se podrían decir muchas cosas pero dejaré que sea la propia 'problemática Señora Apple' la que conteste con una de las letras del disco: "Dijo «está todo en tu cabeza» y yo añadí «como todo», pero él no lo entendió. Pensé que era un hombre pero era sólo un niño pequeño".

Corramos un tupido velo y terminemos diciendo que "When The Pawn..." representa a una artista en plena confianza en sí misma, descubriendo su sonido propio y personal, sabiendo sacar lo mejor de sus colaboradores y entregando una de las mejores colecciones de canciones de su carrera. Puede que este sea el disco más indicado para entrar en el mundo de la fantástica, maravillosa, especial y sí, también problemática, Señora Apple.

 

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