The Rutles
Biografía, más o menos inventada, en la ficción: Todo el mundo conoce a los Rutles, son la banda más grande de la historia, Ron Nasty, Dirk McQuickly, Stig O'Hara y Barry Wom. Desde el momento en el que Nasty y McQuickly se conocieron y formaron la pareja compositiva más famosa de todos los tiempos, creando la Rutlemania en todo el mundo, con sus pegajosas canciones como "Hold My Hand", "I Must Be In Love" y sus prominentes paquetes en sus ceñidos pantalones, hasta sus películas, como "Ouch!", su actuación en el Che Stadium (llamado así en honor al guerrillero argentino que había participado en la revolución cubana, Che Stadium) o el momento en el que comenzaron a expandir su música y sus horizontes, después de que Bob Dylan les descubriera el té, llegando a su gran obra maestra, "Sgt. Rutter". Como todo el mundo sabe se separaron a finales de los 60 después de que sus relaciones se deterioraran tanto que Dirk y Nasty se casaron... No el uno con el otro, por supuesto, sino con mujeres. Dirk con una actriz francesa que no hablaba inglés, y tampoco mucho francés, y Ron con Chastity, una artista vanguardista cuyo padre había inventado la II Guerra Mundial. Su separación supuso el fin a los sueños e ideales de los 60 y el comienzo de una época dorada para los abogados, aun así, todo el mundo sabe que los Prefab Four serán para siempre una leyenda viva que vivirá mucho después de que otras leyendas vivas hayan muerto.
Vida más allá de la ficción: Un Monty Python, un Bonzo Dog Doo-Dah Band, un tipo que estuvo en los Beach Boys y el tipo que hacía de Ringo, o lo que es lo mismo Eric Idle, Neil Innes, Ricky Fataar y John Halsey, todos tocan y cantan de verdad a excepción de Idle, al que cubren Ollie Halsall, que aparecen en la película como el quinto Rutle, y Andy Brown, las magníficas canciones que parodian a los Beatles están compuestas por Innes. En 'All You Need Is Cash', el documental que hay que ver sí o sí, también aparecen Mick Jagger, Paul Simon o Ron Wood, además de varios asociados del 'Saturday Night Live', el programa en el que aparecieron un par de ocasiones los Rutles, John Belushi, Bill Murray, Gilda Radner o el propio jefe del SNL, Lorne Michaels. Ah y también aparece uno de los mayores fans de los Rutles, George Harrison que dijo sobre ellos "En cierto modo, The Rutles me liberaron de los Beatles. Fue lo único que vi de esos programas de televisión de los Beatles que hicieron. En realidad era la mejor, más divertida y mordaz parodia. Pero al mismo tiempo, fue hecho con el máximo amor...". Amén
Conclusión: Eric Idle debería juntar a la banda para terminar con su propio “Now And Then”
The Blues Brothers
Biografía, más o menos inventada, en la ficción: "Joliet" Jake y Elwood se conocieron en el orfanato Rock Island City de Chicago y les unió su amor por el blues, inculcado por lo único parecido a una figura paterna que tuvieron, el conserje de aquel tétrico lugar, Curtis, un afroamericano de pelo gris, gafas de sol perennes y sombrero del que decían que en su juventud había tocado en el mismísimo Cotton Club, en la banda de Cab Calloway, esa por la que pasaron gente como Dizzy Gillespie o Ben Webster. El caso es que Jake y Elwood se hicieron hermanos de sangre en un juramento en el que participó una cuerda de la guitarra de Elmore James y de la que salieron con un apellido para la historia, Blues. En 1969 fueron descubiertos por Marshall Checker y aunque nunca fueron un auténtico grupo de blues, consiguieron convertirse en un producto comercial viable, gracias principalmente a una banda de músicos de acompañamiento de ensueño. Jake era el cantante principal, mientras que el silencioso Elwood tocaba la armónica, lo suyo eran principalmente versiones y una energía explosiva. Todo saltó por los aires cuando Jake fue detenido después de un atraco y condenado a 4 años de cárcel. A su salida los hermanos Blues se juntaron otra vez y tras enterarse que Curtis se quedaba sin trabajo, pues iban a cerrar su orfanato, Jake tuvo una revelación en la Iglesia y decidieron reunir de nuevo a la banda para conseguir el dinero y evitar su cierre. Lo lograron, no sin antes llevar el caos a Chicago en la persecución de coches más costosa de la historia y volver entre rejas, esta vez juntos y con la banda al completo.
Vida más allá de la ficción: Los Blues Brothers surgieron como un sketch recurrente en el 'Saturday Night Live', con Belushi y Aykroyd, grandes fans de la música negra, vestidos de abejas, poco a poco lo fueron puliendo y aparecieron los míticos trajes, las gafas de sol y los sombreros que llevarían a la película dirigida por John Landis, que ya había dirigido a Belushi en "Desmadre a la americana". La película, “Granujas a todo ritmo”, que salió en 1980, fue un exitazo, algo normal si tenemos en cuenta que ya habían sacado un disco en 1978, en directo, y había sido número uno en las listas de Billboard con más de 3 millones de copias vendidas. Lo increíble de todo era la banda que acompañaba a Belushi y Aykroyd, Steve "The Colonel" Cropper y Donald "Duck" Dunn de Booker T & The MG's (además de haber tocado en prácticamente todos los grandes éxitos del sello Stax, el mítico inicio de 'Soul Man' de Sam & Dave, ese es Cropper, las canciones de Otis, Wilson Pickett...), Matt "Guitar" Murphy, uno de los mejores guitarristas de blues (ha tocado con Howlin' Wolf, James Cotton, Etta James, CHuck Berry, Otis Rush...), Willie "Too Big" Hall (mítico batería de los Bar-Keys y la banda de Isaac Hayes...). Eso por no hablar de la lista de invitados a la película, donde, a pesar de tener que recurrir a dos blancos para los papeles protagonistas la música de los Blues Brothers recorre todo el espectro de la música negra de EEUU, del blues de John Lee Hooker a las raíces góspel de la hija del predicador, Aretha Franklin, del Cotton Club de Cab Calloway a los estudios de Stax, eso sin olvidar dos de las figuras más importantes de la música americana, Ray Charles y James Brown. La muerte de Belushi no les impidió seguir tocando, con su hermano Jim o John Goodman en su lugar, y hubo hasta otra nueva película, "Blues Brothers 2000", pero sin Belushi la cosa perdió casi toda su gracia.
Conclusión: Si hablamos de los músicos involucrados en la misma, los Blues Brothers no tienen rival...
Spinal Tap
Biografía, más o menos inventada, en la ficción: Spinal Tap son una verdadera leyenda, una con un único objetivo, como el de todo el buen rock & roll, hacer daño, lograr que tus oídos sangren, cambiar tu vida, aunque no necesariamente para mejor... El día en el que Nigel Tuffnel conoció a David St. Hubbins, un chico que compartía su pasión por la música y era igual de negado que él para ella, la historia de la música cambió para siempre, aunque fuera para peor. Al principio se hicieron llamar los Thamesmen y seguían los pasos de bandas como los Rutles o los What, su primer sencillo ya dejaba claro su lema, “Gimme Some Money”, aquí no había dobles entendidos, ni metáforas escondidas, danos algo de dinero, eso es lo que siempre han buscado. Cuando el viento cambió hacia el "paz, amor y música" la banda, ya Spinal Tap y con la primera aparición del imprescindible Derek Smalls, sacó "Listen To The Flower People". El mensaje era claro, no hables, no pienses, solo escucha. Cuando a finales de los 60, el dinero pasó a estar en el naciente heavy metal, Spinal Tap no dudó en girar sus amplificadores al 11 (los únicos que lo pueden hacer) y virar, como una veleta, en esa dirección. Así llegaron los grandes clásicos como "Big Bottom", "Swallow My Love" o su canción más mítica "Stonehenge", un tema de rock progresivo en el que el hard rock se funde con el folk y el misticismo. Es considerado como su "Stairway To Heaven", la canción que nunca puede faltar en sus directos (con una espectacular escenografía), aunque, para la mayoría de críticos, como el inmortal Lester Gang, "son como Led Zeppelin, solo que mucho peor". Su fama decayó en los 80 e incluso se separaron pero, al final, se volverían a juntar y lograrían hasta su propio día, el 11 del 11 del 2011, en homenaje a ese mítico Marshall de Tufnel que sube hasta el 11.
Vida más allá de la ficción: Espabila Stella Maris, estos tipos han tocado en Glastonbury o en Live Earth junto a 28 bajistas más, entre ellos miembros de Metallica, Foo Fighters o Beastie Boys. Pónganse en pie para aplaudir a los tres creadores de todos esto, Michael McKean, como el cantante principal y guitarrista rítmico, David St. Hubbins; Christopher Guest, como el guitarra solista Nigel Tufnel; y Harry Shearer, como el bajista Derek Smalls. El primero interpretó al hermano mayor de Saul Goodman en “Better Call Saul”, el segundo era el asesino de 6 dedos de “La princesa prometida” al que Iñigo Montoya le repetía eso de "me llamo Iñigo Montoya, tú mataste a mi padre, prepárate a morir" y el tercero es la voz original del señor Burns, el director Skinner, Ned Fanders, Kent Brockman o el Dr. Hibbert en "Los Simpson". Aun así, para mí siempre serán Spinal Tap, los autores de “This Is Spinal Tap”, ese falso documental tan divertido y, a la vez, real que hizo que la mitad de las estrellas de rock se murieran de la risa al verse reflejadas y la otra mitad tuviera una depresión por exactamente lo mismo. El director de ese falso documental, no fue otro que el gran Rob Reiner, que también hizo su propia parodia de Martin Scorsese al interpretar a Martin "Marty" Di Bergi.
Conclusión: La banda ficticia más grande de la historia, algo que corrobora la presencia de Paul McCartney o Elton John en su esperadísima segunda parte (aunque todos sepamos que igualar o superar la primera es casi una misión imposible).
The Wonders
Biografía, más o menos inventada, en la ficción: Los Oneders eran una de las muchas bandas americanas que se formaron después de la fulgurante aparición de los Rutles, su cantante y su guitarra habían compuesto una canción llamada “That Thing You Do”, un medio tiempo, y querían presentarla en un concurso de talentos, pero su batería se había lesionado, así que, como era normal entre los grupos de los 60 (hola, Pete Best), decidieron reemplazarlo. El nuevo batería hizo con su tema, lo que George Martin con el “Please Please Me" de los Beatles (¿o era el “Hold My Hand” de los Rutles?), cambiarle el tempo y convertir una canción lenta en algo totalmente chispeante e imparable. Su éxito fue tan imparable como su posterior desaparición, la canción subió posiciones como la espuma en las listas del Billboard y llegó a alcanzar el puesto 7 pero el grupo se había desmoronado, el bajista se enroló en el ejército, el guitarrista se largó a Las Vegas y el cantante se negó a cantar las canciones del otro. Al final el batería fue el único miembro que quedaba de los renombrados Wonders y para cuando la canción alcanzó su pico, llegando al segundo puesto, ya se había largado con la ex novia del cantante y dejado el efímero pop por el sesudo jazz. Dicen que el cantante se terminó convirtiendo en productor, el bajista luchó en Vietnam y el batería acabó enseñando jazz en un conservatorio, pero cuentan las malas lenguas que el guitarrista, se cambió el nombre se fue a vivir a Nueva Orleans y se convirtió en el irascible DJ Davis, que tuvo un éxito local con su propia canción, "(You can't fire me) I Quit"...
Vida más allá de la ficción: A ver la culpa de todo esto la tiene Tom Hanks que es el que escribió la película, la dirigió y puso como protagonista a un tipo que era, básicamente, una copia de él mismo de joven, Tom Everett Scott, pero sí por algo se recuerda a The Wonders, y con razón, es por la canción que escribió Adam Schlesinger y que se convirtió en un éxito por sí misma en 1996, siendo nominada al Oscar como Mejor Canción Original, en el mismo año en el que se produjo el debut de su banda, Fountains Of Wayne. En 2017 tres de los actores originales se reunieron para tocar “That Thing You Do!” en concierto (en el disco no lo hicieron y la voz principal la puso Mike Viola, amigo de Schlesinger. Tom Everett Scott (visto en 'La La Land' o en 'Por trece razones'), Ethan Embry y Johnathon Schaech se pusieron sus camisas blancas y pajaritas negras para volver a subirse al escenario, y convertirse en Guy, el chico del bajo y Jimmy respectivamente, y revivir a los Wonders en el Roxy de Los Ángeles.
Conclusión: Si los Wonders consiguieron algún oyente extra para el añorado Adam Schlesinger y para sus Fountains Of Wayne, ya cumplieron bien su papel
Stillwater
Biografía, más o menos inventada, en la ficción: Stillwater se crearon siguiendo la nueva ola de rock duro británico creada a partir de Led Zeppelin, Black Sabbath… y Spinal Tap, con una de esas dinámicas guitarrista / cantante en la onda de Page y Plant, Iommi y Ozzy o Tufnel y St. Hubbins, con el guitarrista como compositor principal y el cantante como foco. Claro que en el caso de Russell Hammond y Jeff Bebe, el primero roba demasiado protagonismo al cantante, creando una situación de tensión de donde saldrá su único éxito, “Fever Dog”. La banda vive la vida del “sexo, drogas y rock & roll” al máximo que permite la época, esto es barra libre para hacer lo que les dé la gana. No fueron mucho más allá de “Fever Dog”, aunque ese sencillo se cotiza alto entre los coleccionistas de 45 revoluciones. Cuando Hammond dejó la banda Jeff Bebe grabó un par de discos con otro guitarrista que no fueron a ninguna parte y terminó viviendo en un parque de caravanas, dejándose un buen mostacho, bajo el nombre de Earl Hickey. Penny Lane escribió un libro sobre las estrellas del rock llamado “Estoy con la banda, confesiones de una groupie”, pero volvió a caer prendada de lo más parecido que salió en los 90 a una estrella del rock de los 70, Chris Robinson de los Black Crowes con el que se casó y se divorció, aunque por lo menos, no fue porque éste se la jugara a las cartas. El periodista que les hizo un conocido reportaje para la Rolling Stone, William Miller, dejó el periodismo y se convirtió en un afamado director de cine, llegando a ganar un Oscar como guionista de una película en la que hablaba sobre sus tiempos como reportero adolescente para la revista de Jann Werner. Por último, Russell Hammond dejó la banda para seguir una carrera en solitario en la que graba instrumentales en solitario que no interesan a nadie. A pesar de quedar semi olvidados, tuvieron su pequeña resurrección a principios de los 90 cuando Pearl Jam se hicieron una versión en directo de “Fever dog”, con Mike McCready declarando a Russell Diamond como uno de los dos guitarristas, siendo el otro Stevie Ray Vaughan, que más le habían influido.
Vida más allá de la ficción: Cameron Crowe echa la vista hacia atrás para rememorar sus tiempos en la Rolling Stone. Teniendo en cuenta lo que tuvo que presenciar su mirada es extrañamente amable y nostálgica, sin querer hacer sangre sobre la depravación que era corriente entre las estrellas del rock de los 70, digamos que prefirió mirar a esos años a través del “Tiny Dancer” de Elton John en vez del "The mud shark" de Zappa, en la que este retrataba aquella anécdota que contenía a John Bonham, una groupie menor de edad y un tiburón… Por cierto la música de Stillwater tenía ese punto años 70 porque estaba hecho por gente como Nancy Wilson de Heart, que en ese momento era la mujer de Crowe, o Peter Frampton, y si Hammond sonaba tan convincente es porque había un verdadero ‘guitar hero’ detrás de él, Mike MCCready de Pearl Jam-
Conclusión: Se creían Led Zeppelin y no pasaban de Greta Van Fleet
Soggy Bottoms Boys
Biografía, más o menos inventada, en la ficción: Los convictos fugados Everett, Pete y Delmar tuvieron varias aventuras en Mississippi mientras intentaban escapar de la justicia, fue en una de ellas en la que conocieron al gran guitarrista de blues Tommy Johnson que acababa de vender su alma al diablo en un cruce de caminos. Mientras estaban los cuatro juntos se enteraron de que podían conseguir algo de dinero haciendo un disco para una emisora de radio local. Así nacieron los Soggy Bottom Boys, y su versión de "Man of Constant Sorrow" se convirtió en un éxito en el Sur, aunque ellos no se enteraron al principio, habiendo recibido cada uno un dólar por la grabación. Tommy se separó de los tres para continuar su carrera en solitario, pero fue apresado por el Ku Klux Klan e intentaron ahorcarle, pero Everett, Pete y Delmar se infiltraron entre el Klan y lograron rescatarle. Fue entonces cuando el cuarteto se enteró por casualidad del éxito de "Man of Constant Sorrow" cuando la tocaron en uno de los mítines del gobernador Pappy O'Daniel que viendo el éxito conseguido les dio el perdón. En los 40 se trasladaron a Memphis donde Johnson se convirtió en uno de los primeros bluesman con una guitarra eléctrica, aunque no podían tocar juntos por ser un grupo integrado, sí que hicieron una última grabación juntos como los Soggy Bottom Boys, fue en marzo de 1951, en los estudios Sun de Memphis, donde un joven ingeniero llamado Sam Phillips les grabó haciendo una versión del "Blue Moon Of Kentucky" de Bill Monroe, en donde la sensibilidad country de Everett, Pete y Delmar se combinaba con un cortante solo de guitarra de Johnson que muchos vieron como el inicio de un nuevo género, el rock & roll. Poco más se sabe de su historia, aunque hay que destacar que Everett Clooney es el abuelo de George, el conocido actor.
Vida más allá de la ficción: Los hermanos Coen hacen su particular versión de “La odisea” de Homero, llevándosela al Sur de EEUU en los 30, haciendo guiños al Preston Sturges de “Los viajes de Sullivan” y buceando en los orígenes de la música popular estadounidense, country, folk, blues y góspel, creando una de sus más divertidas comedias. Y no Clooney, Turturro y compañía no cantan, sino que les ponen voces el cantante Dan Tyminski, el compositor de Nashville Harley Allen, y el miembro de los Nashville Bluegrass Band, Pat Enright. La banda sonora de la película tuvo tanto éxito que, a veces, hacen giras como los Soggy Bottom Boys. Ah y, por cierto, Tommy Johnson no está basado en Robert Johnson sino en el propio Tommy Johnson, el autor de “Canned Heat Blues” del que también circula la leyenda de que vendió su alma al diablo por su habilidad como músico.
Conclusión: Buceando, a veces literalmente, en las fuentes de la música popular Americana
Hedwig & The Angry Inch
Biografía, más o menos inventada, en la ficción: Hansel Schmidt nació en el lado equivocado del Muro, para un adolescente que adoraba el rock, a Bowie y a Iggy, estar atrapado en Berlín Este no era lo mejor. Allí conocerá a un militar estadounidense, Luther Robinson, que le convence para que se cambie de sexo, se case con él y salga de allí. Hansel se convierte así en Hedwig Robinson y pasa a vivir en Kansas como una mujer, pero en el primer aniversario de su matrimonio Luther se marcha a vivir con un hombre. Hedwig conoce entonces al joven Tommy Speck, mientras forma una banda con las mujeres coreanas de otros militares. Poco a poco irá modelando y enseñando a Tommy sobre el rock & roll e iniciando una relación con él, además de darle un nuevo nombre, Tommy Gnosis, pero cuando este descubre que Hedwig no nació mujer, gracias a la pulgada cabreada que le quedó tras su operación de cambio de sexo, le abandona y comienza una exitosa carrera en solitario donde canta las canciones de Hedwig y las que hicieron juntos. Es entonces cuando Hedwig forma su banda de acompañamiento, The Angry Inch (La Pulgada Cabreada) y se marcha a seguir a Gnosis por su gira de estadios tocando en garitos de mala muerte de las mismas ciudades y contando su historia a todo aquel que quiera escucharle. Puede que no lograran el triunfo comercial que sí tuvo Tommy Gnosis, pero lograron que las Sleater Kinney les versionaran junto al gran Fred Schneider de B-52s, además de Frank Black y Kim Deal y sus Breeders, algo que llevaría a la reformación de los Pixies. Cuentan las malas lenguas que, como en los Monkees, no eran ellos los que tocaban los instrumentos en las grabaciones originales, y que entre las guitarras que escuchamos suena la del mismísimo Bob Mould de Hüsker Dü y Sugar.
Vida más allá de la ficción: John Cameron Mitchell y Stephen Trask llevaron con éxito a la gran pantalla su musical, mezclando al Bowie de Ziggy con un poco de The Rocky Horror Picture Show y algo de Cassavettes. Una de las mejores películas musicales de la primera década del Siglo XXI. Además de los mencionados en la biografía ficcional, estos pesos pesados también grabaron las canciones de Hedwig, Yo La Tengo con Yoko Ono, Jonathan Richman, Rufus Wainwright, Polyphonic Spree, Spoon, Imperial Teen, Cyndi Lauper con The Minus Five (el grupo de Peter Buck de R.E.M.), The Bens (Ben Folds, Ben Lee y Ben Kweller), They Might Be Giants o Robyn Hitchcock.
Conclusión: Larga vida a Hedwig & The Angry Inch
Sex Bob-omb
Biografía, más o menos inventada, en la ficción: “¡Somos Sex Bob-omb, uno, dos, tres!” Posiblemente hayan visto más camisetas con este logo que con el de los Ramones pero como los de Queens, Sex Bob-omb son una banda de música y no una marca de ropa. Al principio sus integrantes fueron Stephen Stills (no ese Stephen Stills) a la guitarra y la voz, Scott Pilgrim al bajo y Kim Pine a la batería, aunque terminaron triunfando cuando el joven Neil (que no Neil Young) acabó reemplazando a Pilgrim. Aunque dos de sus integrantes se llaman muy parecido a dos integrantes de Buffalo Springfield lo suyo es el indie y el low fi, “We Are Sex Bob-omb” es su gran clásico (aunque Scott Pilgrim insista en llamarla "Launchpad McQuack") pero la canción que mejor les describe es su oda a los camiones de basura.
Vida más allá de la ficción: Un clásico del cómic que tuvo una excelente adaptación cinematográfica a cargo de Edgar Wright con Michael Cera como Scott Pilgrim, además de un reparto estelar con Mary Elizabeth Winstead, Kieran Culkin, Brie Larson, Aubrey Plaza, Chris Evans o Jason Schwartzman, y Beck, sí el Beck de “Odelay", poniendo música a las canciones de Sex Bob-omb.
Conclusión: "Somos Sex Bob-omb y estamos aquí para hacerte pensar sobre la muerte, ponerte triste y cosas"
Los Happiness
Biografía, más o menos inventada, en la ficción: Los Happiness nacieron para ser portavoces de la "Asociación Nuevo Renacer, por una Juventud sin Mácula", querían destacar los valores de la familia tradicional, la castidad y el matrimonio, en una sociedad corrompida por el sexo, principalmente entre miembros del mismo género. Eran dos chicos y dos chicas, Cayetano Motos, Borja María Arcega Jones, María del Mar Prima de Rivera y Laura Álvarez, e hicieron el himno definitivo a la castidad “Amo a Laura”, escrito por el primero, con ese estribillo celestial en el que decían aquello de “Amo a Laura pero esperaré hasta el matrimonio”. Fue un éxito nacional y aparecieron en varios programas de televisión, como en el de Buenafuente. Tras el fracaso de su segunda canción, “El honor de Laura”, sus miembros se separaron y pasaron a trabajar en los consejos de administración de las empresas de sus padres. Años después hubo un pequeño escándalo cuando, tras la publicación de la biografía de Britney Spears, en la que hablaba de su embarazo y aborto de Justin Timberlake, Laura salió diciendo que también había pasado por lo mismo con Cayetano. En la actualidad Los Happiness (menos Laura) van todas las noches, junto a sus familias, por supuesto numerosas, a Ferraz a ¡putodefenderespaña!
Vida más allá de la ficción: La MTV se apuntó un tanto megaviral en 2006 con una campaña que fue galardonada con el premio Sol de Platino en la XXI edición del festival de publicidad El Sol, siendo considerada la mejor campaña integral, por cierto la viral canción corrió a cargo de Guille Milkiway de La Casa Azul.
Conclusión: Guille Milkiway sabe cómo componer un megahit
Stella Maris
Biografía, más o menos inventada, en la ficción: Stella Maris es una girlband de pop ultracatólico que está por compuesta por seis hermanas, Aina, Cecilia, Julia, Neus, Beth y Nora Puig Baró cuyo principal objetivo sobre la faz de la Tierra es salvar el mundo a base de música celestial y vídeos musicales hechos con clase y criterio. La compositora principal de las letras es su madre, Montserrat Baró, que las recibe directamente de Dios, así que puede que otro de sus principales objetivos sea echar por tierra aquella declaración de Ron Nasty de que los Rutles eran más grandes que Dios y que este nunca había tenido un éxito. Ahora, gracias a Stella Maris, y al Primavera Sound, eso va a cambiar, así que querido creyente, querido seguidor, escucha las canciones de Stella Maris y confirma que Dios es más grande que los Beatles, perdón, que los Rutles y gánate la salvación eterna.
Vida más allá de la ficción: Los Javis han dado en el clavo con “La Mesías” pero su pequeño Frankenstein, en forma de grupo (y, digan lo que digan, tan basado en Flos Mariae como los Rutles en los Beatles), toma vida propia y saca disco y se va a presentarlo al Primavera Sound, Amaia incluida. Detrás están Hidrogenesse, que ni son Dios ni lo pretenden, y a la producción Raül Refree.
Conclusión: Como fenómeno televisivo han sido la mejor noticia de la ficción nacional de este año, como cabezas de cartel del Primavera… habrá que esperar.
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