Crocodiles, los discos de mi vida (2024)

Los estadounidenses Crocodiles se acercan nuevamente a nuestro país dentro de la gira de presentación de su álbum “Upside Down In Heaven” (23).

Les podremos ver como cabezas de cartel de una de las jornadas del festival In-Somni (12 julio, Sala Wolf, Barcelona). Pero dejemos que sus dos miembros fundadores nos descubran los seis discos de su vida.

El grupo también actuará en Zaragoza (9 julio, La Lata de Bombillas), Murcia (10 julio, La Yesería) y Valencia (11 julio, Loco Club).

Charles Rowell (guitarra)

Bo Diddley - "Bo Diddley Is A Gunslinger" (1960)

Probablemente el disco más apreciado en la furgoneta de gira (y en el coche, cuando giramos solamente nosotros dos). Es la pieza de música más genial y novedosa que existe, al margen del reggae de sexplotaition. Solíamos programar el ritmo de Bo Diddley en nuestra caja de ritmos para ayudarnos con la escritura de nuestras canciones.

Neu! - "Neu!" ( 1975/2010)

Tengo un recuerdo muy claro de nuestro primer año de girar sin parar. Salíamos de nuestro primer SXSW y yo estaba dormido, conduciendo del tirón, y el sonido estridente de un platillo me despertó de repente. ¡Era “Sonderangebot” de Neu! Este disco fue una de las principales influencias que tuvimos al formar nuestra banda. Puedes darte cuenta de forma muy obvia escuchando canciones como “Young Drugs” –más en la onda de “Neu! 4”– y “Mirrors”.

Suicide - "Suicide" (1977)

Nuestra primera canción fue una versión de “Ghost Rider”. Recuerdo un montón de fiestas en casa en las que escuchábamos este disco. Ponerlo me lleva a un momento muy especial de nuestras vidas en el que éramos jóvenes y libres, y estábamos hambrientos y... colocados.

   Brandon Welchez (voz y guitarra)  

Chrome - "Half Machine Lip Moves" (1979)

Cuando Crocodiles empezamos a actuar en el verano de 2008 solían recibirnos con burlas, disgusto o, en una buena noche, con desinterés. Así que rápidamente perfeccionamos una forma de terrorismo sonoro usando nuestros instrumentos y pedales para atacar a audiencias hostiles con ráfagas de ruido y feedback. Una vez en Texas, durante una de las primeras giras, pudimos mantener a raya a una panda de vaqueros enfurecidos que se estaban acercando al escenanario. Creamos un muro de ruido tan estremecedor que la mitad de esos idiotas terminaron cagándose en sus Wranglers.
Cuando llego el momento de grabar nuestro primer álbum, “Summer Of Hate” (09), nos inspiramos mucho en el uso de Chrome del collage de audio y de los interludios instrumentales discordantes tanto entre como dentro de sus canciones. Intentamos crear nuestra propia versión de esto utilizando el armamento sonoro que habíamos aprendido a usar durante la gira. En un guiño a Chrome, le pusimos su nombre a la primera canción del disco.

The Music Machine - "Turn On The Music Machine" (1966)  

Ambos somos grandes fans de la música de los sesenta, pero cuando empezamos ninguno de los dos estaba interesado en imitar a una banda de aquellos tiempos. Nuestros cortes de pelo de aquellos días podrían haber dicho lo contrario, pero en nuestros corazones éramos hombres de nuestra época. Lo que sí intentamos es tomar el elemento de groove, frescura y agresión de bandas como The Music Machine o The Troggs e incorporarlo en lo que estábamos haciendo. El que nuestros instrumentos fuesen teclados Casio, viejas cajas de ritmos y pedales rotos de efectos de los ochenta sacados de contenedores de basura nos garantizaba no correr el peligro de sonar como una banda que imitase los sesenta.

Spacemen 3 - "Playing With Fire" ( 1989)

La influencia de Spacemen 3 en nuestro primer material es indiscutible. Éramos dos jóvenes punks psicodélicos que tomaban drogas para hacer música para tomar drogas. Queríamos desorientar e hipnotizar a nuestros oyentes en la forma en la que Spacemen 3 nos habían hipnotizado a nosotros. Nos enseñaron mucho sobre la forma en que podíamos aprovecharnos de la repetición y sobre la forma de reconciliar lo cruel con lo bello.