Unas pizzas caseras, queso del bueno y unas cervezas nos acompañan en la reunión/cena que tenemos con nuestros productores Iñaki Llarena y Leyre Aranguren, no vemos otra forma mejor de pensar un buen plan. Es la segunda vez que nos juntamos también con Daryna, nuestra nueva teclista. Sobre la mesa de la peña empezamos a hablar de objetivos, fechas, estilos. Estamos hablando de septiembre del 2015, para entonces todos tenemos claro que queremos ir a Inglaterra a grabar ya que nos parecía imprescindible para encontrar el sonido más adecuado para nuestros temas. La siguiente quedada será un par de semanas después en Estudios Aberin para ver como está el grupo.
PRE-PRODUCCION
Tras grabar las canciones, parece que tenemos varios temas pero hace falta algunas más para redondear el disco, a su vez han quedado atrás otras ideas de canciones que más adelante saldrán a la luz, o no. Ese mismo día hablamos también de posibles estudios, barajamos Astoria, una casa barco de David Gilmour convertida en estudio, o The Church. Iñaki había trabajado antes en Abbey Road y nos preguntó a ver que nos parecería grabar allí, sin pensar demasiado ese fue el momento en el que decidimos que íbamos a hacer lo posible para grabar en los estudios más famosos del mundo.
Los siguientes cinco meses fueron trabajo de composición y ensayo tanto individual, como con el grupo en conjunto e incluso con Iñaki y Leyre. Ellos nos guiaban un poco también en cuanto a estructuras, melodías y sonido. Han hecho función de producción desde los cimientos del proyecto.Durante este tiempo han salido ideas, nuevos temas, descartamos otras para finalmente quedarnos con diez. Por su parte Iñaki fue trabajando la reserva del estudio, mandando canciones nuestras, hablando con la gente de allí hasta que a mediados de enero del 2016 nos confirman que el sábado 20 de febrero está disponible el estudio 3 de Abbey Road para nosotros. También nos dimos cuenta que podríamos ser el primer grupo euskaldun en grabar allí. Las semanas posteriores y sobre todo la semana anterior a la grabación fue un intensivo en Estudios Aberin con ensayos hasta de ocho horas seguidas para tener la mente preparada para el día de la grabación, ya que íbamos a grabar todo en un día. ¡Teníamos que grabar un disco de diez canciones en un solo día!
ABBEY ROAD
Por fin llega el día de volar a Londres, el viernes 19 de febrero. A la vez que estábamos muy concentrados en nuestro trabajo ninguno de los tres éramos totalmente conscientes de lo que estábamos a punto de hacer. Fue un día con una mezcla de emociones y sensaciones, seriedad, emoción, euforia, cansancio del viaje y por fín llegamos a Londres el viernes por la noche. Iñaki había hablado con Toby Hulbert, el que sería nuestro ingeniero de sonido en los estudios y quedamos que ellos irían el sábado a las once de la mañana y nosotros nos acercaríamos al estudio a las doce, cuando tuvieran el montaje un poco adelantado.
En realidad nos acercamos todos a las once, nos podía la emoción y aprovechamos para hacernos algunas fotos y vídeos en el mítico paso de cebra y alrededores del estudio y echarnos un café antes de entrar. Entre ese rato de espera y el momento de entrar por la puerta creo que fueron los momentos más tensos de toda la estancia. Por supuesto a las doce clavados estábamos en la puerta del estudio donde nos acogió el recepcionista quitando hierro al asunto: “¿Vosotros sois los del estudio 3? Ahí se grabaron el disco Revolver de The Beatles y Dark Side Of The Moon de Pink Floyd”.
En los pasillos nos guiaban fotos, entre otros, de los hermanos Gallagher o Amy Winehouse grabando en el mismo estudio donde estábamos apunto de entrar. Entramos y ahí estaba todo montado, micros, baterías, sintes, guitarra... La primera sensación que tuvimos fue de respeto. Respeto por el lugar, por la historia de esos estudios, el material y respeto por la gente que trabaja allí. Ese respeto nos llevaba a su vez a la responsabilidad y la necesidad e hacer un buen trabajo. No podíamos estar allí y que no saliera algo bien hecho.
Tras un rato de acomodarnos, ya que los instrumentos no eran nuestros, afinar la batería al gusto, probar todos los sonidos, los monitores y tomándonos el tiempo suficiente para estar comodos, ya que íbamos a grabar todos a la vez y eso requiere una concentración extra... ya estábamos todos listos para empezar a grabar. Mano levantada de Iñaki al otro lado del cristal asintiendo que todo iba bien, pregunta por los cascos a ver si estábamos listos, los tres levantamos nuestros pulgares y arrancó la claqueta de la primera canción. Las siguientes horas fueron de máxima concentración y disfrute a la vez, dos tomas y a por la siguiente, como mucho tres tomas. A media tarde teníamos todas las bases grabadas.
Mientras nos relajábamos y aprovechábamos al mismo tiempo para hacer algo de gasto en la tienda del estudio, Iñaki, Leyre y Toby montaron el set de voces. Empezamos a grabar pero la tensión y el cansancio empezaba a afectar al resultado del trabajo. Volvimos a parar un rato que Toby aprovechó para hacernos una visita guiada por los estudios, nos enseñó el estudio 2, el que más utilizaban The Beatles y el 1, donde se han grabado las bandas sonoras de películas como Star Wars, El señor de los anillos y una lista interminable de grandes producciones. No sé si sirvió para calmar o emocionarnos más pero el caso es que fue increíble ver aquellas instalaciones.
En cuanto acabamos la visita también vinieron los amigos de Tripulante Produce para grabar el video de lo que será nuestro primer single “Loreak Bezala”. Para eso volvimos a grabar la canción haciendo voces al mismo tiempo. Extrañamente eso nos relajó y disfrutamos mucho de ese momento por lo que seguimos hasta terminar las voces.
Aunque tuviéramos el estudio hasta las diez de la noche estábamos todos agotados y decidimos marchar a las nueve, que también tenían que recoger todo. Al salir de la puerta de Abbey Road y ver Londres de noche, ni un alma sacándose fotos en el paso de cebra, nos dimos cuenta que ya estaba, que el día que tanto esperábamos había acabado. Salimos de ahí con cierta melancolía preguntándonos si volveríamos algún día y con el trabajo de asumir lo que habíamos vivido. Salimos sabiendo que habíamos dado todo lo que teníamos y a la espera de que el resultado fuese reflejo de nuestro esfuerzo.
Mezcla y mastering
En este aspecto hemos dejado todo en manos de Iñaki y Leyre. Confiamos plenamente en ellos y sabemos que han hecho un trabajo impresionante. Algún día hemos vuelto a su estudio a meter pequeños arreglos que han visto necesarios como algo de sintes, algún coro o algún arreglo de guitarra. No nos hemos preocupados mucho en ese sentido, Iñaki nos parece un genio de las mezclas y así ha sido. Como anécdota nos contaba como había calculado el algoritmo de la reverb natural de la sala de Abbey Road para poner la misma reverb a los sintes y darle una unidad.
Si alguna vez hemos tenido alguna duda ha sido más en aspecto de saber si había merecido la pena ir allí, en lo personal sabemos que si pero en lo musical hasta escuchar algo teníamos nuestras dudas. Hoy es el día que hemos escuchado el resultado final y por nuestra parte queda confirmado que el esfuerzo realizado a merecido la pena. Estamos orgullosos del trabajo de nuestros productores y de la iniciativa que tuvimos. Ahora toca defender el trabajo en directo allí donde podamos, con todas las dificultades que encontramos los grupos independientes e ir pensando en nuestra próxima aventura.
El disco verá la luz en abril de este año.
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