Para un festival que siempre se ha vanagloriado de trabajar sin grandes cabezas de cartel, se hizo raro que una importante masa de fans de El Drogas se adueñase el año pasado de la plaza Nafarroa. La irrupción del exlíder de Barricada fue una rareza que escapaba de la norma no escrita en la trayectoria del Andoaingo Rock Jaialdia. El certamen, indisolublemente asociado a la filosofía de la tienda de discos y promotora Bloody Mary, suele contar con artistas más bien desconocidos para el gran público. Black Lips, leyendas del underground estadounidense, encabezan una edición que vuelve por sus fueros el próximo 10 de junio y que también cuenta con la participación de The Squizophonics, The Courettes, The Giant Robots, Chocolat Billy y Nize. El cartel se completa con los tres grupos vascos que tocarán al mediodía: Arima, SIGLAS y Krin.
El festival cumple 15 años y en su selección domina la mirada de reojo al pasado, concretamente a algunos de los sonidos más excitantes que definieron la década de 1960. El rock and roll explosivo y sin aditivos que practican buena parte de los grupos de este año funciona a modo de resumen de un festival con una marcada identidad propia. El certamen aterrizó en Andoain un poco por casualidad y se ha mantenido más allá de los vaivenes políticos y económicos, desafiando modas en comunión con su público. Para que nadie diga que es un festival de música más, la edición pandémica de 2021 se convirtió en una hermosa celebración colectiva que terminó reivindicando la figura del irunés Juancar García, su alma máter. A continuación, repasamos junto a la cabeza visible de Bloody Mary algunos de los principales acontecimientos que han marcado la historia de un festival único.
Andoain, amor a primera vista
“En 2007 organizamos la gira de Los Straitjackets con Kaiser George y las Pontani Sisters y le propusimos al ayuntamiento de Andoain fijar una fecha. Aceptaron hacerlo al aire libre en la plaza Nafarroa dentro de las fiestas de San Juan. Debido al éxito de la propuesta, a partir de 2008 se programaron las Basterock Gauak (con The Hi-Risers, King Khan, Kim Lenz, Deke Dickerson, etc.) y, como plato fuerte, el festival en junio. Desde el inicio, hubo una buena conexión e interés por parte del Ayuntamiento. Dieciséis años después seguimos con el festival y organizando conciertos en el auditorio Bastero”.
Los Straitjackets vs The Rolling Stones
“La actuación de Los Straitjackets y Kaiser George, que todavía no entraba en lo que fue el certamen, coincidió con el concierto de los Rolling Stones en Anoeta. Aun así, fue un éxito. Tanto musical y visual como de público. Fue la carta de presentación de Bloody Mary para que el Ayuntamiento confiase en nosotros. Lo que vino después ya es historia”.
La primera (gran) edición
“Se llamó Andoaingo Jaialdia y la recuerdo con especial entusiasmo. Tuvimos la posibilidad de meter a todas esas grandes bandas no tan conocidas frente a un público entregado. Vimos que la gente respondió y se lo pasaba estupendamente con Dirtbombs, Viva L’American Death Ray Music, Lisabö, The Trashmen, The Neanderthals, The Maharajas y Las Membranas. Tenía claro que la primera edición debía dejar huella. La plaza se llenó con un ambiente local y foráneo. Fue muy divertido”.
Rock en la plaza del pueblo
“En los primeros años, el bar Ganbara nos ayudaba con los pedidos de bebidas para las bandas. Luego ya empezamos a trabajar con patrocinadores. Al principio, los bares seguramente estarían confusos y con dudas sobre a dónde podía llegar todo esto, algo que no deja de ser normal. Muchos vecinos de Andoain nos han reconocido que siempre esperan la fecha del festival con mucha ilusión. Quiero recalcar que desde el comienzo siempre hemos tenido muy buena relación con el departamento de Cultura del Ayuntamiento, lo que ha facilitado todo el trabajo”.
Territorio Chester
“La segunda edición también fue tremenda. Les hicimos girar a los Cherterfield Kings junto a Roy Loney & Señor No para poder traerlos al festival. ¡Y fue la rehostia! Se juntaron leyendas como Downliners Sect con otros como The Phantom Surfers, Ivan Julian & Capsula y Los Creyentes, la primera banda en la que militó Perico de Dios, de Guadalupe Plata. Ahí descubrí su gusto y pasión a la hora de tocar la guitarra”.
Rock de las antípodas
“Desde que abrimos la tienda pusimos un apartado de grupos de Australia, que sigue más vivo que nunca. Puedo mencionar varias bandas actuales de allí que me apasionan: Cash Savage & The Last Drinks, Stiff Richards, Mod Con, Split System, Amyl & the Sniffers, Shifting Sand… No solamente demuestran tener un sonido fácilmente reconocible, sino que tienen grandes conocimientos musicales y son, sencillamente, gente encantadora. Se han convertido en grandes amigos. Por otro lado, traerlos a Andoain suele ser un reto.
Recuerdo cuando tocó Kid Congo Powers. Ese año también tocaba Tex Perkins (de los Beasts of Bourbon) y llegó justo cuando sobre el escenario estaba Kid Congo. Perkins salió corriendo de la furgo y se fue a la primera fila con una cara de felicidad que no se me olvidará nunca. Con esto quiero señalar el interés que demuestran estos artistas por otros grupos, y esto influye a la hora de crear música. Como suelo decir: el triángulo del rock está formado por Melbourne, Detroit y Bera. Nunca fallan”.
Lo de Thurston Moore fue un trip (1)
“El factor sorpresa es algo que me fascina cuando voy a un concierto. Me ha pasado varias veces y es algo que admiro en los artistas. En el caso del concierto de Thurston Moore, la víspera del festi me enteré de que en su bolo de París había tocado un solo tema, lo que acentuó todavía más mi curiosidad por saber lo que haría en Andoain. Nuestro querido amigo Ignacio Julià venía al concierto y lo comenté con él, ambos estábamos expectantes. La curiosidad por su directo se había elevado a la categoría de suspense. Durante la prueba de sonido pudimos observar que algo mágico se avecinaba.
Recuerdo esos momentos como el preludio de un gran concierto. Minutos antes del directo, le comenté a Ignacio que presentara a la banda. Acto seguido, muchos quedamos poseídos por aquel set instrumental tan denso y, a la vez, enriquecedor, abrumador y con mucho gancho. A lo largo de una hora Moore alcanzó momentos realmente excitantes con esos sonidos”.
Lo de Thurston Moore fue un trip (2)
“Hace tiempo vi a Sonic Youth [el grupo que formó Thurston Moore junto a Kim Gordon] en la sala Txitxarro de Deba y fue increíble. A Moore también lo he visto en solitario en otras ocasiones; siempre me ha parecido descomunal. Pero que un artista como él saliese al escenario y diera ese show en 2019 me parece lo más alucinante que he visto en muchos años. Admiro a los músicos que saben envejecer artísticamente como lo hizo Johnny Cash en su última etapa, como lo hace Bob Dylan o como lo está haciendo ahora Thurston Moore.
En el show de Andoain había que sumergirse totalmente, olvidarse de que el mundo existe. Lo que ocurre con los conciertos gratuitos es que cuando no ves lo que esperabas puedes desilusionarte; a otros, en cambio, nos explota la cabeza. La plaza se abarrotó, hubo silencio absoluto, mucho respeto y distintas opiniones. Es lo que nos diferencia a unos de los otros. Cuando terminó el concierto sentí como si hubiera estado levitando y me hubiera transportado a otro universo. Luego salieron Tropical Fuck Storm y dieron un buen concierto, pero mi cabeza estaba en otro mundo. No lo pude disfrutar al máximo”.
Kim Shattuck: el adiós a un icono
“The Muffs fue una de las bandas que creció con Bloody Mary. Alucinamos con su primer disco [el LP homónimo “The Muffs”] y muchos de nuestros clientes también. En los últimos años, oía comentarios de que su líder, Kim Shattuck, era una chica un poco cascarrabias, pero cuando en 2015 estuvo en Andoain me pareció encantadora y divertida, igual que el resto de la banda. Su concierto fue tremendo y, a día de hoy, muchos dicen que ha sido de lo mejor que han visto en el festival. Las fotos que tenemos con ellos en los camerinos confirman el buen ambiente que hubo esa noche. Su fallecimiento [murió por una enfermedad en 2019] me dolió mucho. Cuando descubres a los artistas primero por su música y luego los conoces en persona se crea un vínculo muy especial. La recordaremos siempre con mucho cariño”.
Amor en tiempos de pandemia
“Yo soy solo un mero dinamizador que intenta que todo esto ocurra. Agradezco y me emociona mucho todo el cariño que el público me trasmite, especialmente en la edición de 2021, que hicimos casi en familia por las restricciones del coronavirus. Pero las alabanzas son para el público. Sin ellos no podríamos contar con estos artistas y yo estaría jugando a la petanca. Intentamos crear una relación cercana con los grupos y hacer que se sientan como en casa. Ellos se muestran muy agradecidos, lo que creo que se nota en sus actuaciones. Eso siempre es un regalo y, por supuesto, un espaldarazo para poder continuar”.
Nueva era, nuevas alianzas
“Tengo ya una edad y hay días en los que me planteo bajar el pistón. La pandemia hizo que me centrara más en la venta de discos y, aunque tengo mucho trabajo, es más relajante que montar conciertos. Como hemos metido el gusanillo de la música a nuestros hijos, me dan mucha caña y me contagian su energía: estoy viviendo una segunda juventud. Marcos ha colaborado siempre en la selección de las bandas (al igual que mi mujer Idoia y mi hija Berta), y para este año se encarga de la producción y promoción del evento. ¡Estoy como para jubilarme ya mismo!
Conocí a Joan Vich [de la promotora Ground Control] cuando contraté a Melenas. El trato que tuve con él fue una gozada. Me pareció una persona honesta y muy profesional y, sobre todo, sentí una conexión musical, algo que busco a la hora de tejer alianzas. Después del final de Ia promotora musical I Wanna, decidí llamarlo para asociarnos y que colaborase en el festival. Se mostró encantado. Gracias a Joan este año tocan Black Lips en exclusiva en la plaza Nafarroa. En su libro, “Aquí vivía yo”, muy recomendable, me identifico mucho con las cosas que cuenta. Es un tío muy curioso. Somos un buen tándem, ¡un indie y un rocker en toda regla!”.
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