1.-Un Giorgio Moroder del "otro" mundo
Omar Souleyman está en boca de medio mundo. Desde los DJ’s que lo popularizaron antes de que fichara por un sello occidental, hasta los músicos indies españoles, pasando por los bookers de los mejores festivales internacionales. No en vano, Marc Dorian lo resalta entre sus mejores descubrimientos recientes: “Me encanta su fraseo, muy basado en la repetición, y la hipnosis que crea con el ritmo y los arreglos. Es muy interesante”. Todo en la música de Omar Souleyman corta como una cuchilla aunque se trate de una música festiva. Salvando las distancias, sería como un Giorgio Moroder del otro mundo, preocupado por integrar la electrónica en su tradición, partiendo de unos presupuestos musicales populares, pero poniendo el punto de mira en las producciones de baile más limpias y potentes del viejo continente.
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