Fundación Tony Manero
La de misión de la Fundación Tony Manero era clara: revitalizar el disco. Y empezaron con lo fácil (relativamente, claro), ganándose al público tirando de versiones de los clásicos y sacando un primer disco de una de sus sesiones semanales en la sala Bikini. Hasta ahí todo más o menos normal. Lo excepcional viene cuando empiezan a sacar discazos como "Looking For La Fiesta" (Drac/Virgin, 01) y "Sweet Movimiento" (Drac/Virgin, 02), en una clave funk que les venía que ni pintada y que los confirmó como algo que, más que un revival, era un monumento a la música negra hecho desde los barrios de Barcelona.